Posted on diciembre 28, 2011 in Consumo Responsable, Derechos, Economía, Ideas, Trabajo by miki1 Comment »

El comercio justo sigue las mismas pautas de la agricultura ecológica. Empieza como un proyecto interesante, innovador en cierto modo, promovido por gente comprometida… y poco a poco siendo absorbido por la gran máquina del comercio que todo lo arrasa. Primero vino la certificación oficial (privada, claro), luego vino la gran distribución, que impone condiciones y precios a los productores. Como respuesta, vuelven a surgir alternativas más coherentes y justas. Pero no corramos…

Los consumidores de comercio justo quizás no se hayan parado a contestar ciertas preguntas como… ¿cómo es posible que algo traído de la otra punta del globo sea justo cuando para su transporte consumimos un hidrocarburo obtenido tan injustamente, con guerras, invasiones y muuuucho sufrimiento… y cuya combustión genera unas repercusiones devastadoras para países explotados, generando tantos refugiados medioambientales? No es una pregunta fácil de contestar, pero no por ello interesante de plantear. Otra posible sería… ¿qué es más justo, cómprar productos con un sello de comercio justo o presionar a la unión europea para que no imponga (junto con la organización mundial del comercio) la apertura de los mercados de los países que queremos “ayudar”? Es decir, “abrir los mercados”, aunque suene justo y bonito, significa simplemente, dejar las puertas abiertas al saqueo de sus recursos, imponerles unas condiciones injustas a sus productores, sumiéndolos en la miseria… implica que el Estado local no pueda comprar los excedentes de producción de los pequeños productores para asegurar económicamente la producción interna (algo que en Europa hicimos en los ochenta y funcionó “demasiado bien”).

 

Antes de contestar a estas preguntas es interesante ver el siguiente documental sobre el comercio justo, muy interesante. En él investigan el impacto que tiene el que las grandes distribuidoras hayan ingresado en el comercio justo. Es interesante no sólo por las implicaciones que tienen en el comercio justo, sino porque muchos procesos son aplicables al resto de productos. Es decir, que las mismas dinámicas que siguen con productores y distribuidores de comercio justo, las siguen con el resto de productores y distribuidores. El desequilibrio de poder tan grande que hay en la distribución de alimentos pone de relieve, todavía más, la importancia de establecer redes descentralizadas y lo más cortas posibles para la distribución de alimentos, por ejemplo, mediante grupos de consumo.

 

En el documental se plantean cuál de los modelos de comercio justo es mejor: el dominado por las grandes distribuidoras, el de los pioneros en el comercio justo que se tienen que plegar a las imposiciones de las grandes distribuidoras o el de un comercio más justo pero mucho más elitista en cuanto al precio final del producto. Quizás falte una opción más: productos como café, cacao, té, azúcar… no son alimentos básicos (de hecho muchos crean adicción) por lo que… ¿¿realmente los necesitamos?? ¿No sería mucho más justo para todas que consumiéramos aquí y allá productos de un comercio más humano y local?

Posted on diciembre 19, 2011 in Consumo Responsable, Derechos, Economía, General, Ideas, Vivienda by mikiComentarios desactivados en Esta navidad…

Esta navidad…

 

Esta navidad nos harán creer que es una navidad cualquiera: luces de navidad, las mismas tiendas, más mercadillos ocupando plazas, más premios y pedreas en la lotería… ¿crisis? No pasa nada, ¡endéudese! Cofidis ofrece un crédito de 3000 euros para aquellas familias que lo están pasando mal, para que estas Navidades sean inolvidables (sin duda, nos lo recordará el 24,5%TAE al tener que devolverlo). Lo siento, por mucho que lo intenten ayuntamientos y bancos, estas navidades… no van a ser unas navidades cualquiera. Y es que el “sueño” narcotizante de una navidad envuelta en consumo, alegría y felicidad extrema se está viniendo abajo…

 

Esta navidad será la primera navidad en la que más gente habrá tomado consciencia del poder de “los mercados”, de la necesidad de cambiar de sistema, del absurdo del consumismo atroz, del despilfarro… Gracias al 15M, el discurso general ha cambiado, y ya no es de extrañar oir frases como “los mercados dictan la política que nuestros gobiernos siguen”. Esta navidad, será también la última navidad que pasen muchas familias en sus actuales casas (ya que la mayor parte de las denuncias por impagos en la hipoteca todavía no han llegado a la fase de ejecución del desahucio, pero el año que viene sí). Esta navidad será una navidad todavía más especial…

 

Los estímulos al consumo son vitales para el crecimiento económico (no así para la felicidad de las personas ni para la justicia social). Ante tanta navidad superficial e injusta, diversos movimientos sociales alzan la voz, algunos como veteranos anticonsumo, otros con nuevas voces. Así, en plena campaña navideña, el 28 de diciembre, la cabalgata del 15M se llenará de un contenido interesante, sin duda alguna, al que invitamos a participar.

 

Resulta llamativa la propuesta de Cáritas, que aboga por vivir con sencillez. Dejando a un lado la cuestión de las creencias religiosas que mencionan en el punto 6 de su decálogo, que daría para mucho debate pero que entendemos que se puede tratar por separado, si nos fijamos en el resto de propuestas en sí, resultan muy interesantes. Merece la pena leer frases como: “La crisis económica ha puesto al descubierto el callejón sin salida al que nos está llevando este modelo económico basado en el crecimiento sin límite. Los países y los ciudadanos estamos endeudados por encima de lo que producimos o ganamos. Los datos confirman que la fórmula actual, basada en el crecimiento, no favorece a toda la humanidad sino sólo a unos pocos: el 20% de la población mundial posee el 90% de la riqueza que hay en el planeta, mientras más de 4.000 millones de personas viven en estado de pobreza. Esta crisis también ha puesto de manifiesto que el mundo vive por encima de sus posibilidades físicas. Estamos destruyendo el planeta a un ritmo sin precedentes y consumimos un 25% más de los recursos que la Naturaleza produce anualmente”.

 

 

Desde luego es un paso en la dirección correcta, y sorprende gratamente que una institución de tanto calado dentro de la Iglesia Católica se exprese en esos términos (sorpresa que no debería ser tanta desde el momento en que estas propuestas, en teoría, están muy en línea con la filosofía de vida que se supone que transmite el cristianismo). En todo caso, todavía quedan muchos por dar (esperamos que con tiempo los den): tanto en su discurso (como empezar a hablar de formas alternativas de organización colectiva y reivindicaciones políticas de gran calado) como en su modus operandi (se hace necesario un debate interno sobre el voluntariado y la explotación, así como hacer campañas contra la actividad financiera y especulativa de la Iglesia católica, o sus exhibiciones de lujo y ostentación, eso para empezar).

 

Y es que la crisis aumenta la tensión entre grupos humanos que se encuentran dentro de jerarquías verticales, donde la acumulación de poder y recursos deja a unos pocos opulentos y unos muchos explotados… y la Iglesia católica no es una excepción (más y cuando explotados por el sistema económico o que sean conscientes de tal explotación, los hay católicos y no católicos). Pero en fin, no deja de ser una campaña reseñable por sus términos y valores explícitos.

 

Os dejamos con dos recomendaciones sobre la navidad. Una, para el sábado por la noche: la noche temática, “Consumo desmedido“. Otra, para DR”Ya mismo”, sobre la violencia y cómo responderla estas navidades, ambas muy recomendables. Parece que algo está cambiando, sí… quizás algún día, quién sabe, podamos decir, sin miedo a equivocarnos, eso de… Feliz Navidad.

Posted on diciembre 13, 2011 in Activismo, Agroecología, Ciudad, Economía, Naturaleza, Transición, Vivienda by mikiComentarios desactivados en Urbanitas y Rurales… Enredados

Un núcleo de personas hacen una serie de reuniones por vía telemática, sin ni siquiera verse las caras, y el proyecto cuya idea original nació del subgrupo de Medio Rural de Sol (grupo de trabajo de Medio Ambiente) va cogiendo cuerpo, va fraguando. El objetivo: realizar un encuentro de personas, denominado Rurales Enredados, interesadas en “hacer vida” en el medio rural, con el fin de crear red entre todas ellas. Conocerse, como un primer paso para plantearse, por qué no, apoyos, colaboraciones o incluso cooperativismos futuros.

El encuentro ha tenido un enorme éxito de convocatoria, y es que cada vez somos más las personas que consideramos que uno de los grandes frentes de lucha contra el capitalismo está en el campo, en volver a rediseñar nuestra relación con la tierra. Es evidente que una de las herramientas más potentes del sistema es la industrialización del sector primario, la denominada agroindustria. Y también es evidente que las consecuencias de esta intromisión del espíritu del lucro en la tierra son desastrosas: despoblación, sumisión a las metrópolis, destrucción por agotamiento de suelos rociados durante décadas con sintéticos derivados del petróleo, ataque contra  formas de vida que tendían y tienden a la autosuficiencia, escapando de las imposiciones de “los mercados” en nuestras vidas, aumento de enfermedades relacionadas con la alimentación, crecimiento de la pobreza en el planeta, movimientos masivos de poblaciones abocadas a la exclusión social, desposeídas de sus tierra. Y así podríamos estar…

¿En el encuentro? Rostros esperados, algunas sorpresas agradables y, sobre todo,  mucha gente animada. Gente que ya inició su andadura en el campo y urbanitas que desean engrosar las filas de los llamados neorrurales. Gente de campo de toda la vida y gente que no se plantea abandonar la urbe…pero todos y todas dando una sensación global de buscar objetivos comunes.

            Los promotores del encuentro han hecho un gran trabajo. Las dinámicas escogidas multiplicaban la riqueza de ideas, los talleres del programa han tenido mucho éxito (bioconstrucción, talla en madera…), las charlas han sido interesantes (sobre ganadería, la okupa rurbana catalana Can Masdeu”, escuela libre, decrecimiento…). Se han echado de menos debates como el de la cuestión de género en el medio rural, clave para cualquier acción totalmente transformadora. Y quizá ha habido asistentes que han considerado exagerado el papel preponderante de lo espiritual y místico (en vez de “Universal y la Energía”) dentro del programa. Talleres de Reiki, flores de Bach, sexo tántrico, yoga metamórfico…un 40 por ciento de las actividades más o menos.

¿La sensación general? Variada y positiva: de creación de sinergias, de un deseo sincero de conocerse, de acercarse, de enseñar y aprender…ante todo, la de que esto hacía mucha falta. Unos días muy motivadores, tanto para los que rumiamos la idea del éxodo ciudad-campo, como para los que estamos entregados en crear estrechos vínculos campo-ciudad, que hagan la vida en el campo económicamente viable y la vida en la ciudad un poco más auténtica, un poco mejor.

Es una lástima que las personas que creen que “el 15M está muerto” no se personen en estos eventos. Sería un argumento de peso para contraponer a ese pesimismo relajante en el que prefieren vivir, ese que dice: “pero si no hay nada que hacer”.

Vengo del encuentro y os respondo: “no puedes estar más equivocado. Lo que hay es mucho que hacer”.

Raúl (y  pinceladas de Jose y de miki)

Posted on noviembre 22, 2011 in Derechos, Economía, Ideas, Política by miki4 Comments »

Tiempos oscuros e injustos se ciernen sobre nosotros… A pesar de que los cuatro principales partidos han perdido 22 escaños con respecto a las elecciones del 2008, y a pesar de que los partidos minoritarios han coseguido un éxito equiparable al que tenían al principio de la democracia (es decir, nuestra conciencia democrática se ha revitalizado), una ley electoral injusta a todas luces ha dado una aplastante mayoría absoluta a uno de los dos partidos neoliberales (bueno, al más neoliberal de los dos, si alguien quiere hacer distinciones). Es decir, que la voz del pueblo no se escucha ni en las urnas. Tampoco sería muy alagüeño el panorama si, como por arte de magia, nuestro gobierno decidiera dar plantón a los mercados y demás instituciones financieras. Simplemente darían otro golpe de estado financiero, como el que aconteció recientemente en Italia y Grecia, y pondrían a un gobierno títere de sus intereses.

 

¿Pero cómo hemos llegado a esta situación? Muy sencillo. El capitalismo no es compatible con la democracia. ¿Cómo? Efectivamente. En un sistema económico basado en la competencia, hay una inevitable acumulación de capital, pues el que más acumule desplazará a sus competidores. El pez grande se come al chico. Con el paso del tiempo, era inevitable que esa acumulación de capital sobrepasara al capital de los Estados. Y, como es de sobra conocido, quién tiene el dinero, tiene el poder. Es decir, que en el momento en el que organizaciones económicas no elegidas democráticamente (multinacionales, bancos…) acumularon más poder que los Estados y otras organizaciones como Naciones Unidas (elegidas de manera dudosamente democrática, pero democratizables al fin y al cabo) empezaron a imponer sus normas del juego. Es decir, que el pez grande se comió a los chicos y, al crecer lo suficiente, también se comió a los Estados.

 

En un mundo sin democracia, en unos tiempos oscuros… es donde las luces que brillan dentro de nosotras empiezan a dar sus frutos. Y es que una emite fotones y no sabe muy bien dónde van a parar, a quién ilumina con su indignación, con sus ganas de cambio y con sus acciones. Pero lo cierto es que hay algo que recorre el mundo y va contagiando de forma imparable unos países y otros. Tanto es así, que un grupo de estudiantes de economía de Harvard ha dicho “BASTA” a una educación dogmática y gobernada por intereses económicos. Al enfoque único y neoliberal que dan en una asignatura han respondido de forma organizada y colectiva, respetuosa pero contundente. Y la cosa no para en esa asignatura… La historia es un rayo de luz en uno de los lugares más oscuros del planeta y, por ello, brilla con una fuerza inspiradora.

 

Nos han quitado la democracia, y nos intentarán aplastar de forma económica, educativa, legislativa e, incluso, por la fuerza. Pero lo que no saben es que hay cosas que no se pueden parar, que cuanto más nos repriman y opriman, más indignados seremos y más indignados estaremos. Será interesante, y una incertidumbre, ver cómo las organizaciones grandes y poderosas enfrentan su propio colapso a la vez que emergen organizaciones pequeñas, más horizontales, y realmente más poderosas, con formas alternativas, críticas y creativas de organizarse y relacionarse.

 

Patalearán, pero es una batalla que tienen perdida de antemano.

Posted on noviembre 14, 2011 in Bancos, Decrecimiento, Economía, General, Ideas by mikiComentarios desactivados en Ateos y herejes de una nueva religión

Quienes hayáis leído algo más de decrecimiento os sonará, probablemente de sobra, lo que a continuación sigue. Aunque sea un concepto bastante básico, creo que merece la pena traerlo a colación. Y es que ya hablaba Serge Latouche de la “religión del crecimiento económico“. Pero, ¿qué es eso de la religión de qué?

 

Muy sencillo. Tan sólo hay que comparar el respeto y silencio sepulcral que guarda la gente inconscientemente en un banco… y en una catedral. A veces, incluso, es más reverente la actitud que se despliega en una sucursal bancaria. ¿Y la reacción que despierta en la gente la afirmación “hay que cambiar el sistema económico”? ¿Difiere acaso del escándalo que provoca en un fiel al poner en duda sus creencias más férreas? Antes los reyes debían de rendir pleitesía al Papa de la Iglesia católica. Ahora los gobiernos han de rendir pleitesía a los Mercados y demás instituciones internacionales no democráticas (FMI, BM, Comisión Europea, Bancos mediante sus agencias de calificación…). En caso contrario, caerán, al igual que lo han hecho los de Italia y Grecia la semana pasada.

 

Durante décadas, y hoy todavía, el anticapitalismo (es decir, cualquiera de las miles de alternativas al capitalismo) ha sido representado como algo márginal, utópico o incluso peligroso. Hay que ser competitivo, sacrificarse en tiempos de crisis, hacer recortes sociales, favorecer la gestión privada, que es siempre mucho más eficiente que la pública, el ser humano es egoísta por naturaleza y, sobre todo, la libertad para comprar y vender se erige como un derecho fundamental, muy por encima del derecho a la vivienda o a la alimentación. La regulación de los mercados es rápidamente tachada de comunista, la planificación económica (algo que, por otro lado, hacen gran parte de las grandes empresas y los estados) provoca la misma reacción. Y, como el comunismo ha fracasado y sólo hay dos opciones, el capitalismo es lo único que funciona.

Y ahora una puede preguntarse… ¿no hacen precisamente eso las sectas? Dogmatismo, intolerancia, razonamientos incorrectos, premisas incorrectas, pensamiento acrítico… Esta analogía no está carente de ejemplos. Y, frente a la teología neoliberal del Dios único del Mercado (o en su versión en plural, los Mercados, aunque igualmente monoteísta), hay gente que reacciona, incluso desde la religión desterrada se alzan voces de denuncia. Serge Latouche defiende, no tanto el decrecimiento, sino el acrecimiento (término que considera más cercano a nuestra postura, aunque menos impactante). Y es que, cuando el Dios es el crecimiento económico del PIB, el acrecimiento y el ateísmo se fusionan sugerentemente. Cuando los dioses eran Zeus y compañía, los cristianos eran llamados ateos. Ahora nos toca a nosotras. Orgullosamente ateas, felizmente ateas de esta nueva religión, no sólo viviremos nuestra vida desde la crítica de los dogmas neoliberales, sino que seguiremos construyendo entre todas alternativas sin dogmas, sin imposiciones y con la alegría que da la simplicidad voluntaria, ejercida individual y colectivamente, en una sociedad que todavía busca la luz, aunque la busque en las tinieblas de la acumulación del capital. Poco a poco las ventajas del decrecimiento voluntario y socialmente justo irán dando esa luz que muchas buscan en la adoración al dios Mercado. Esa luz mostrará un mundo en el que nosotras seremos nuestra propia luz, un mundo en el que tendremos verdadero poder, un mundo que construiremos colectivamente, y ya no dependeremos de ningún sistema que nos promete la luz mientras nos mantiene en permanente oscuridad. Y es que la religión, ahora más que nunca, es el opio del pueblo.

Posted on septiembre 20, 2011 in Derechos, Economía, General, Ideas, Política by miki1 Comment »

El mundo se acelera y el conspiranoico escenario que algunos denunciaban es hoy más claro que nunca. La acumulación de riqueza generaliza la pobreza, la acumulación de poder supedita la política a los intereses de unos pocos (poderoso caballero es Don Dinero)… este sistema agoniza, y sus últimos coletazos son los más rabiosos. Desde que tanta gente que no era especialmente defensora ideológica de la democracia salió a las calles para exigir democracia, desde que tanta gente que era muy crítica con la constitución española salió a las calles para defenderla de las ingerencias alemanas (que obedecen a “los mercados”, ese ente abstracto detrás del cual se refugian personas con nombres, apellidos y responsabilidades que tarde o temprano tendrán que afrontar), desde que tanta gente que piensa diferente deja sus diferencias a un lado para luchar por unos mínimos arrebatados violentamente (a veces con violencia física, normalmente con violencia económica)… se puede decir que algo no va bien.

 

Cada vez es más obvia la ingerencia en la soberanía nacional (la privatización del espacio político, podría decirse) que se ejerce sobre nuestro sistema “democrático”. Ahora todas tenemos más claro que la banca y los especuladores financieros gobiernan sobre la política económica de los países, las farmacéuticas gobiernan sobre la sanidad, las empresas de agroalimentación hacen lo respectivo sobre las políticas agrarias y la producción y distribución de alimentos… La pregunta que sigue es ¿quién gobierna sobre la educación?

Desde que el desarrollo de la imprenta occidental arrebató el monopolio de la cultura a los laboriosos monjes copistas y desde que las desamortizaciones disminuyeron el patrimonio de la Iglesia, ésta ha perdido su hegemonía en la educación en favor de una educación pública. Sin embargo, el despiadado y descarado ataque neoliberal a lo público (que llaman “crisis”) ha planteado nuevos retos a la educación, ya obsoleta antes de la crisis. Y ahora ésta se debate entre un proceso de mercantilización de la educación, impuestos recortes en gasto público en el ámbito educativo y un cambio de paradigma importante. “La sociedad está cambiando rápidamente, y la educación tiene también que amoldarse a los nuevos tiempos”. ¿Qué hay detrás de estas palabras? ¿Quién ostenta el suculento pastel del sistema educativo? Y si es tan suculento, ¿por qué el Estado no se hace cargo de él?

 

Pueden identificarse dos frentes de ataque a la educación. Uno es el de la administración y otro es el del modelo educativo. La tendencia de administrar la educación desde lo público está revertiéndose. Aunque las cifras varían según las fuentes, en la Comunidad de Madrid, mientras hay recortes en la educación pública, también hay recortes en lo que las arcas públicas recaudan en las matrículas de colegios privados, que son más o menos de la misma cuantía. Por lo tanto se roba a la educación pública y se regala a la educación privada prácticamente lo mismo. Es decir, la educación, y no es la única, está pasando a manos privadas con la excusa de la crisis.

 

Pero ahí no acaba la cosa… El modelo educativo es otro filón. Si antes lo tenían editoriales de libros de texto, ahora se tiende a que pase a manos de empresas de nuevas tecnologías. El razonamiento es el siguiente: primero se asume que la educación ha de preparar a los jóvenes para su inserción en el mundo laboral (no para ser felices, no… para trabajar), después se dice que el mundo laboral ha cambiado (de trabajos estables, monótonos y repetitivos a “mayor movilidad laboral” en trabajos más creativos y que exigen nuevas habilidades) y acto seguido se da la solución: hay que personalizar la educación e introducir nuevas tecnologías en el aula. Así la necesidad está creada y la solución, anteriormente diseñada, se sirve en bandeja. Ahora queda por saber qué empresas se llevarán el gato al agua, pero mientras no existan redes de internet y nuevas tecnologías disponibles para todos (software libre…) la brecha digital, la brecha económica y la brecha público-privado será la misma. Es decir, mientras los centros públicos no tienen dinero para invertir en nuevas tecnologías porque no reciben financiación apenas… los centros privados pueden invertir en estas nuevas tecnologías. Después se venderá que la educación digital es mejor que la anticuada y obsoleta educación pública… hasta que se implante como una obligación en los planes de estudio, lo cual sería una estocada perfecta a la educación pública.

 

Sin embargo no se podrá acabar con la educación pública, ni mucho menos, ya que, a mayor necesidad educativa, mayor fuerza cobrará la educación libre autogestionada: escuelas populares… Así, la educación seguirá el camino del resto de servicios públicos: si asfixian lo público para pasarlo a manos privadas, surgirán alternativas libres desde la autogestión. Por lo que en esta crisis se abre la puerta (que siempre ha estado abierta) a la autogestión (gestionarlo entre los participantes) y, por tanto, a una democracia real, aquí y ahora.

Posted on agosto 22, 2011 in Derechos, Economía, Ideas, Trabajo by miki1 Comment »

¡Ni un día sin fútbol! ¡Fútbol de calidad internacional reconocida! ¡La liga española es la mejor liga del mundo! Pero… ¿a qué precio?

 

Nuestra liga de fútbol profesional nos ha obsequiado con un regalo excepcional, una oportunidad de oro para comprender cuál es la principal raíz de un sistema económico injusto a todas luces y con muchas sombras… Los futbolistas están de huelga… Sus sensatas reivindicaciones laborales vienen motivadas por deudas, incumplimientos de contrato… pero, ¿cómo hemos llegado a esta situación?

Es aparentemente sencillo: los equipos de fútbol han convertido a este deporte en un lucrativo negocio que sigue, sin embargo, siendo un deporte de competición. Y es que estos equipos compiten entre ellos en un campo de fútbol, y los equipos que mejores (que no necesariamente más caros) jugadores y entrenadores tengan, tendrán más probabilidades de ganar. Así, la presión por contratar a ciertos jugadores ha hecho que los sueldos de algunos deportistas “estrella” hayan adquirido proporciones desorbitadas… Ahora bien, ¿quién y cómo se pagan esos salarios? Muy sencillo (aunque simplificado): los clubes de fútbol pagan los salarios, que recaudan (con pingües beneficios) de los derechos de transmisión de los partidos de fútbol (así como de los derechos de imagen de los futbolistas) que pagan las cadenas de televisión, que sacan beneficio del dinero que recaudan de la publicidad que emiten por nuestras pantallas, pagado por empresas que hacen repercutir en el precio del producto en cuestión el precio de la publicidad. Es decir, que cada vez que compramos algunos productos, estamos pagando indirectamente unos sueldos monumentales a algunos futbolistas. Es decir, el dinero privado lo pagamos todos, de ahí que la reivindicación de un salario máximo esté plenamente justificada.

 

Ahora bien, esos salarios han de pasar primero por las arcas de los clubes de fútbol, los cuales son también empresas que han de maximizar beneficios para, en un futuro, tener jugadores más caros (que no necesariamente mejores) para ganar más competiciones, vender más camisetas, ser más famosos y cobrar más derechos de imagen y derechos de transmisión… para en un futuro poder tener jugadores más caros para ganar más… bla, bla, bla… es correr para quedarse en el mismo sitio y, cuanto más invierten los demás equipos, más has de invertir para no quedarte atrás. Esta necesidad imperiosa de maximizar beneficios ha empujado a los clubes a endeudarse, tanto con entidades bancarias como con los propios jugadores: necesidad de inversión, de acumulación de capital. ¿Os suena?

Pequeñas economías en competición permanente, obligadas a acumular capital, maximizando beneficios a cualquier precio, incumpliendo contratos, renegociando convenios laborales a la baja, endeudándose con los trabajodores y con las entidades bancarias (verdaderas beneficiarias de tal competición)… y es que no es sino la competición el fundamento último de nuestro sistema económico, motor y causa de todas nuestras desdichas sociales.

Las crisis siempre son parte del sistema capitalista. Sin embargo, entender esta crisis no es fácil, sobre todo porque siempre la cuentan con palabras que nadie (ni los economistas) entiende pero todo el mundo repite… Una opción es tratarlo con un lenguaje más llano.

 

Otra opción es tratarlo de una forma más gráfica.

 

Otra razón para que no se entienda la crisis, es que esta crisis no es crisis de producción y oferta/demanda, como los ciclos que nos explicaban en clase de historia y que entendíamos ese día, el día del examen y se nos olvidaba… Esta crisis no es de la economía productiva. Es el caracter especulativo de las transacciones financieras el que ha obtenido una dimensión monstruosa, grotesca, desproporcionada… y el que ha hecho que la economía tome un camino propio, diferente… Además, nos enfrentamos a un endeudamiento crónico del estado, el cual financiaremos cada vez más los ciudadanos y las PYMES, cada vez con menos poder adquisitivo, por lo que nuestro Estado tendrá que endeudarse más… y así en un ciclo sin fin (o no…).

Esta crisis, por lo tanto, es diferente, no sólo porque se base en el caracter especulativo de la economía… sino porque nos hemos topado de frente con la limitación de recursos naturales, en especial con la limitación de los recursos petrolíferos. Al disponer de cada vez menos energía, la recuperación queda seriamente comprometida. Ésta es, por tanto, no una crisis cíclica, sino la crisis definitiva del sistema. Esta crisis no acabará nunca. Por varias razones, ni políticos, ni científicos ni ciudadanos entendemos las repercusiones de esta crisis. No es por ser agorero… Si vuestro hijo se dirigiera en patinete hacia un precipicio, ¿Qué le diríais? “¡¡Hijo, salta, que te vas a caer por el precipicio!!” o “Venga, hijo, que puedes hacerlo mejor, ¡dale caña!”. ¿Qué postura sería cruel?

 

Ya EEUU casi se declara en bancarrota, si acaso han puesto un parche… que no durará mucho. Ayer la única bolsa que abrió (la israelí) tuvo que cerrar por haber bajado el 6%. Hoy nuestra bolsa no lo ha sufrido mucho por cuestiones efímeras. Pero la población lo sufre cada día. Desde la negación del acceso a alimentos debido al incremento de su precio (véase el caso del cuerno de África) debido a la especulación con alimentos… hasta los recortes sociales en las sociedades sobredesarrolladas.

 

Nuestro futuro dependerá de nuestra capacidad para evitar el pánico y anticiparnos a lo que se nos viene encima. Una vez hemos topado con los límites de la biosfera, tan sólo podemos rezar o aprender, la elección está en nuestras manos.

Posted on julio 27, 2011 in Activismo, Derechos, Economía, Política by mikiComentarios desactivados en Los héroes que acampan

Como ya sabréis, varios cientos de personas cerraron la puerta de su casa tras de sí, mochila en mano, para recorrer varios cientos de kilómetros hasta llegar, exhaustos pero entusiasmados, a una ciudad que les recibió con los brazos abiertos, con comida, con música, con alegría y con un sentimiento de hermandad que no deja de ser sobrecogedor para todos… En su camino, las siete marchas hicieron parada y asambleas en más de 300 pueblos, donde fueron acogidos y donde ellos escucharon los problemas de cada uno de esos pueblos, dando voz a los que, por su lejanía de los grandes núcleos urbanos, son olvidados por los poderes políticos. A estos alegres andarines podríamos llamarles héroes sin miedo a equivocarnos, personas imbuídas del mismo espíritu altruista y muy interesado en cambiar las cosas, cambiar el sistema, cambiar las reglas del juego…

 

Una vez juntos, en Madrid, siguieron trabajando, a pesar del cansancio acumulado. Su intención era elaborar un documento con todas las quejas que han escuchado en su travesía y llevarlas al Congreso de los Diputados. Pero no sólo les bastaba con eso… Ahora que estábamos todos juntos, era tiempo de hablar, discutir ideas y empezar a hacer cosas en común, por lo que hicimos un foro social. Para sorpresa de todos, un inesperado apoyo, un ex-primervicepresidente y economista jefe del Banco Mundial, Joseph Stiglitz. Su intervención nos aportó una motivación aún mayor para seguir cambiando las cosas.

 

Ahora, tocaba llevar las propuestas de los pueblos al congreso. En la asamblea previa que tuvimos entre Neptuno y el Congreso, un policía aseguró que no habría problema en acceder al edificio escoltados para entregar el documento. Pero la actuación policial del día de hoy no deja lugar a dudas sobre las órdenes que recibieron. A estos héroes no sólo les golearon, sino que previamente interrumpieron bruscamente su sueño a patadas y formación amenazante de antidisturbios para desalojar su campamento.

 

Sin embargo, la brutalidad policial no es rival para la picaresca y el ingenio de los indignados, y vestidos como quien va a una boda, accedieron “al Hotel Palace” y, una vez pasado el bloqueo policial, se encaminaron hacia el Congreso, para salir victoriosos y sonrientes con el documento sellado por el registro del Congreso. Finalmente, el documento llegó a manos de “nuestro” presidente, aquel mismo que ejerce según la voluntad de ingerencias económicas internacionales, aquel que no nos representa.

 

Os invitamos a una concentración de protesta hoy mismo, en dos horas, a las 20:00, en el Paseo del Prado, para demostrarles a los políticos que, aún indignados, tenemos más dignidad que muchos de ellos. ¡Nos vemos!

Posted on junio 26, 2011 in Bancos, Economía, Ideas, Política, Trabajo, Vivienda by mikiComentarios desactivados en La carrera que todos perdieron: crisis por correr.

Desde la década de los 80, la estrategia de acumulación de capitales, de competir por tener más beneficios que la competencia, ha ido acelerándose… En los últimos años, sin embargo, esta tendencia ha dejado de lado cualquier consideración ética posible, dando lugar a la pérdida de clase media en las sociedades autodenominadas “avanzadas” (es decir, las que más materias primas necesitan para mantener su nivel de consumo, las que más contaminan en términos globales…). Vamos, que es como si en una carrera de ir dando saltos con los pies juntos cada vez los corredores fueran separando más los pies hasta que todos vieron que el resto estaba empezando a correr y todos hayan acabado corriendo, a toda velocidad, y justificando su violación de las normas del juego alegando que es necesario para ganar, que no hay otra alternativa, que hay que ser más veloces que el resto, que los demás dan pasos más grandes y rápidos que nosotros y que no nos podemos quedar atrás. ¿Os suena?

 

Ante la versión oficial que los políticos y los economistas de tele y corbata repiten como un mantra, otros tienen otra visión de las cosas. El premiado documental Inside Job indaga sobre las causas de la crisis financiera: quién, cómo, por qué… Si queréis verlo sólo tenéis que instalar gratuitamente unos plug-ins, muy sencillo.

 

 

Aquí, en España, aunque los paralelismos no sean perfectos, también tenemos lo nuestro. Hemos elegido el vídeo de Españistán, no por su vocabulario, ni por su final sospechosamente eurocentrista, sino por la claridad de su explicación.

Ambos vídeos señalan claramente que la crisis financiera no es debida a la mala gestión de unos u otros países, sino a descarados intereses económicos de unos pocos y a la cobardía y lamentable, si no ausente, ética de los que dicen representarnos. Ahora, tras el dinero concedido a las farmacéuticas para comprar vacunas contra la gripe A, tras “rescatar” a la banca, tras sueldos vitalicios y múltiples cargos y corruptelas varias… ¿quién se cree que los recortes sociales son necesarios? ¡Basta de mentiras! Nuestra determinación parte de tener la visión clara; nuestra fuerza, de la unidad.

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