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Segundo Ampliado del MST de Bolivia

Durante los días 3, 4 y 5 de agosto tuvo lugar en Sucre el segundo ampliado del MST (acá llaman así a las asambleas generales), con representantes de cada uno de los nueve departamentos del país. Nosotras tuvimos la suerte de ser invitadas por Silverio Vera, un dirigente del departamento de Santa Cruz, en aquel primer encuentro que tuvimos en Montero.

Cuando llegamos a la Escuela Gregorio Reynolds, sede del ampliado y uno de los centros habilitados por el gobierno para alojar a las miles de personas que se iban a dar encuentro el día 6 de agosto (día de la Independencia e inicio de los trabajos de la Asamblea Constituyente), el doctor Javier Aramayo, abogado de Santa Cruz, estaba haciendo una exposición sobre las cuestiones legales que atañen al tema de la tierra en Bolivia y la situación actual del MST en los diferentes departamentos, a raíz de los enfrentamientos que ha habido con terratenientes y empresarios, especialmente en Santa Cruz.

 

Fue curiosa la familiaridad que este hombre despertó en nosotras. Era como estar escuchando a un brasileño del MST hablar sobre el proceso de conquista de la tierra, recalcando el hecho de que la Reforma Agraria no puede únicamente ser un hecho jurídico sino que tiene que ser principalmente un hecho político, que busque tener un impacto político en la sociedad, que persiga sensibilizar y convencer a la sociedad boliviana de que el MST transita hacia una reconducción identitaria, consistente en una identidad organizada en torno a tres principios de acción:

         Acción de hecho (Okupar)

o        Toma de tierras

o        Búsqueda de reparto de tierras por el gobierno

         Resistir

o        Demanda de dotación de tierras

         Producir

 

Propone un cambio de estrategia para el MST, al calor del proceso coyuntural de cambio que se ha venido gestando en Bolivia y que ha propiciado una nueva situación política que puede ser favorable para el movimiento. En este sentido, sería necesario iniciar un proceso  legal por el cual se ponga de manifiesto y se denuncie la existencia de tierras fiscales (susceptibles de Reforma Agraria por estar improductivas) en el país y se le exija y presione al gobierno para que facilite el reparto de las mismas. De esta manera pasarían a moverse en el ámbito de la legalidad (puesto que los asentamientos humanes serían legales y legítimos en esas tierras), y los que pasarían a ser entonces los atropelladores de la legalidad serían los latifundistas y los grandes empresarios que retienen las tierras para especular con ellas.

 

Por otro lado, los temas principales a tratar en el ampliado se basaron la estrategia a seguir con respecto a las solicitudes de tierra fiscales. La cuestión es que algunos departamentos, en los que el movimiento lleva más años de lucha y está más organizado, ya tienen listas las carpetas de solicitud de tierras para presentar ante el INRA y en otros departamentos que recién están empezando a organizarse aún no tienen hecho ese trabajo, por lo que la discusión giraba en torno a la conveniencia de presentar todas las carpetas juntas, de forma unitaria, para ejercer una mayor presión y mostrar al movimiento como un todo organizado y dotarlo así de mayor fuerza, o si por el contrario concebir el proceso por departamentos y que cada uno vaya presentando sus carpetas cuando vayan estando terminadas, para atender así a la delicadeza de la situación de las compañeras de Santa Cruz, que han trabajado en esto durante meses y no creían conveniente esperar más, como finalmente se decidió.

 

Otro tema largamente tratado fue la cuestión de la representación del movimiento y los conflictos de intereses que se han planteado con antiguos dirigentes, que se han ido alejando de las bases hasta el punto que éstas no se sienten ya representadas por ellos. Es por tanto un momento clave para el MST de Bolivia, un momento de, podríamos llamarlo así, refundación y replanteamiento, siempre con la vista puesta en la experiencia de los años de lucha que llevan sobre sus espaldas.

El derecho a matar

Frei Betto.

Usted sale rápido de la cama, se viste con premura, sale corriendo para el trabajo. Usted le prometió a la vieja dama inglesa que terminaría antes del almuerzo la revisión completa del sistema calefactor de la vivienda. Ahora es el momento propicio, en pleno verano europeo. Ella no sabe de dónde vino usted. No sabe que llegó de una tierra mucho más caliente, en el Valle del Río Dulce, donde se considera fresco estar a 30 grados a la sombra. Por eso, usted conserva la costumbre de vestir de saco. Puede ser que, al regreso, la temperatura baje y usted no puede correr el riesgo de enfermarse, y por eso perder días de trabajo; de su oficio depende una familia brasileña en el interior de Minas Gerais.

De repente usted escucha un estampido seco, le arde la nuca como si aflorase un tumor en sus hombros, trata de entender qué ocurre -tiempo suficiente para que, todavía de pie, siete tiros le alcancen en la cabeza. Usted cae muerto.

La gentil dama inglesa quedará a la espera del técnico que prometió terminar de revisar la calefacción. Impaciente, le dirá al fondo vacío de su tacita de té, mientras aprieta con sus dedos el asa de porcelana, que tampoco se puede confiar en esos extranjeros, que no quieren trabajar, basta con adelantarles dinero para comprar las piezas de repuesto y ya no se les ve la cara. Aburrida, cansada de esperarlo, la vieja señora enciende la televisión, su compañera de soledad, y ve la noticia del atentado abortado gracias a la habilidad de la policía británica. Antes de que la bomba amarrada al cuerpo fuera explotada los policías dispararon ocho tiros contra la cabeza del terrorista aún no identificado. La gentil señora se siente aliviada, protegida, a pesar de la estafa de aquel joven extranjero, con cara de árabe, que no cumplió la promesa de revisar el sistema de calefacción.

La cara es de árabe y tiene gesto de terrorista. ¿Por qué lleva chaqueta en pleno verano? Fue lo que pensó el oficial al ver aquel sujeto corriendo en dirección al metro, vistiendo una prenda de abrigo en una mañana tropical de Londres. Y su mirada a los compañeros de oficio bastó para sentir que los otros dos también intuyeron el peligro. Y sintieron igualmente el cosquilleo de la abultada recompensa prometida por el jefe de policía a quien evitase un ataque terrorista. Ese tipo no es inglés. Mucho menos escocés o irlandés. Se ve por el rostro que es afgano o saudita. Si no actuamos rápido, en pocos minutos veremos la estación del metro explotando como una mina repleta de dinamita y pedazos de cuerpos desparramados por todas partes.

La vida, los sueños, el amor y el trabajo de Jean Charles de Menezes cesaron en la boca del metro. Siete balas alojadas en el cerebro y una en el hombro. Terrorista matado disparándole a la cabeza. Primero, para no detonar los explosivos atados a su cuerpo. Segundo, para eliminar esa mente diabólica que programa la muerte colectiva de inocentes y sacrifica la propia vida por una causa sin futuro.

Sin futuro, pero no sin pasado. El bienpensar occidental nos acostumbró a encarar los efectos sin preguntarnos por las causas. ¿Qué es lo que hace a Bin Laden y sus compinches tan abominables? Más que sus métodos criminales, es el no tener en sus manos un estado poderoso. Si estuvieran sentados en la elegante silla de un jefe de estado nadie los acusaría de terroristas.

Hemos sido entrenados para tener horror de la acción imprevisible, inesperada, ilegal, que desafía la lógica y desmoraliza todos los diagnósticos estratégicos. Si ellos estuvieran acomodados en un salón oval, dando la señal verde para que dos bombas atómicas fueran arrojadas sobre las tranquilas poblaciones de Hiroshima y Nagasaki, o firmando el decreto que autoriza a la CIA a desestabilizar democracias sudamericanas, a desencadenar la Operación Cóndor, aprisionar, torturar y matar a miles de jóvenes idealistas a quienes les encantan los Beatles y aspiran a inmundo más justo, nadie diría que se trata de terroristas.

¿Han oído hablar de Ahmad Abdullah? Es un muchacho de al-Qaim, pequeña ciudad situada al oeste de Bagdad. Él también salió corriendo por las calles. Venía radiante de la escuela. Llevaba en sus manos el boletín de final de curso. Quería enseñárselo a sus padres, pues había sacado buenas notas y había aprobado. Una bala de mortero disparada por un soldado made in USA le interrumpió los pasos. Le afectó el estómago, el hígado y el páncreas. Una ráfaga de ametralladora hizo ondular sus cabellos lisos, negros, que adquirieron un tono escarlata. Tenía apenas diez años de edad.

Asesinar en Iraq, en Guantánamo, en Afganistán, no es crimen. Es legal, no provoca horror, se tapa con eufemismos que avergüenzan la libertad y la democracia. El derecho de matar goza de la protección cómplice de nuestra omisión, esa extraña ceguera que nos impide abominar también del terrorismo de estado.

Traducción de J.L.Burguet, Adital, 8 agosto 2005

Frei Betto
Adital
Publicado en www.rebelion.org

Entrevista João Pedro Stedile 8-8-05

Líder do MST diz que movimentos sociais estão preocupados com a paralisia do
governo
"Essa forma de democracia de mentirinha, em que o povo não tem poder nenhum de
decidir sobre o seu futuro, não funciona mais."

O economista João Pedro Stedile, uma das principais lideranças do movimento dos
sem-terra no país, avalia que a crise é muito mais grave do que aparenta.A
crise não seria apenas política, segundo ele, mas também econômica e social. "É
como se o Brasil estivesse numa encruzilhada histórica. A crise que estamos
vivendo é muito grave, profunda e será prolongada", afirma o coordenador
nacional do Movimento dos Trabalhadores Rurais Sem Terra (MST). "Estamos numa
crise de projetos para o país, uma crise de destino do Brasil."

Em entrevista ao Correio Braziliense e ao Estado de Minas, Stedile explica por
que, há duas semanas, durante uma manifestação em Curitiba, chegou a decretar o
fim do governo de Luiz Inácio Lula da Silva. Aquele governo Lula que nós
elegemos em 2002 acabou. Agora, temos um governo
Lula-Severino-Sarney-Calheiros.

Desde que estourou a crise, Stedile se dedica a correr o país para animar a
militância e alertar que não se pode apenas ficar embasbacado com a enxurrada
de denúncias que varre o noticiário. É preciso, segundo ele, sair do imobilismo
e deixar de lado a postura passiva. Stedile vê, assim, uma possibilidade de
superação da crise: Estimular as lutas sociais e a mobilização de massas, que é
o único caminho capaz de alterar a correlação de forças atual. A seguir, os
principais trechos da entrevista. A esquerda precisa rever seus métodos

O governo Lula acabou?
João Pedro Stedile O povo brasileiro votou em Lula para realizar mudanças.
Durante a campanha eleitoral, foram apresentadas promessas e, no entanto,
nenhum dos compromissos relacionados com as mudanças para o povo foi cumprido.
Depois veio a crise de 2005. E aí o governo faz uma reforma ministerial que
representou uma aliança ainda mais conservadora. Então, quando disse que o
governo Lula acabou, foi no sentido de que aquele governo Lula que nós elegemos
em 2002 acabou. Agora, temos um governo Lula-Severino-Sarney-Calheiros.

Como a crise está sendo vista pelas lideranças do MST e pela base do movimento?
Stedile Nossa base e a militância estão acompanhando a crise com muita atenção e
perplexidade, como todos os brasileiros. E estão muito preocupados, primeiro
pelos descalabros dos métodos que foram utilizados. Mas sobretudo estamos
preocupados pela paralisia política do governo que isso causou. E estamos ainda
mais preocupados porque o governo fez um compromisso com a sociedade brasileira
e com nossa base, se comprometendo a acelerar a reforma agrária e assentar 400
mil famílias em quatro anos. Até agora, a reforma agrária andou a passos de
tartaruga, e continuamos tendo mais de 130 mil famílias acampadas esperando os
compromissos.

O que a crise do governo e do PT representa para a esquerda brasileira?
Stedile A crise que estamos vivendo é muito grave, profunda e será prolongada. A
crise não é só de ética ou de corrupção. Estamos vivendo, em primeiro lugar, uma
crise econômica. A continuidade da política neoliberal não tirou a economia da
crise. Os resultados são medíocres. Os únicos que estão ganhando dinheiro e
estão faceiros são os bancos, as multinacionais e quem se dedica à exportação.
Há também uma crise política, porque o povo não acredita mais nos políticos.
Essa forma de democracia de mentirinha, em que o povo não tem poder nenhum de
decidir sobre o seu futuro, não funciona mais. Precisamos fazer uma reforma
política de fundo, que recupere formas de participação da democracia direta, do
direito do povo convocar plebiscitos, revogar mandatos etc. E temos ainda uma
grave crise social, que beira a barbárie, com a falta de emprego, com aumento
da violência, com a falta de serviços públicos de saúde, educação e transporte
coletivo para os pobres. Estamos numa crise de projetos para o país, uma crise
de destino do Brasil.

Quais lições podem ser tiradas?
Stedile Muitas. Primeiro, é preciso que os partidos de esquerda revisem seus
métodos de fazer política. O que o Campo Majoritário (grupo hegemônico dentro
do PT) fez no partido foi utilizar os mesmos métodos clássicos da direita:
tentar ganhar eleições apenas com dinheiro, com marketing. Caíram na ilusão dos
showmícios, dos Dudas da vida. E aí saíram a cata de dinheiro para financiar um
método despolitizado, atrasado, que a direita sempre usou. Portanto, é preciso
recuperar os métodos corretos da política, que é a disputa de idéias, que é
elevação dos níveis de consciência da população, que é estimular o debate e a
participação militante dos cidadãos.

O PT assumiu a Presidência como a promessa de tratar com mais
sensibilidade as demandas sociais, inclusive as colocadas pelo MST. Qual será o
impacto para o MST se a debacle do governo e do PT prosseguir?
Stedile Nosso papel, no MST e nos movimentos sociais, não é ficar apenas
embasbacados com as denúncias. Nosso papel é, em primeiro lugar, fazer reuniões

na base, reunir a militância, debater, entender o momento que estamos vivendo.

Tenho me dedicado a isso 24 horas por dia desde que eclodiu a crise. E, a
partir da compreensão correta do que realmente está acontecendo, estimular as
lutas sociais, a mobilização de massas, que é o único caminho capaz de alterar
a correlação de forças atual. A crise se resolve com debate político, com as
massas e com articulação de forças sociais que queiram mudanças verdadeiras.

Entrevista Don Pedro Casaldáliga

DOM PEDRO CASALDÁLIGA

?Agora, a esperança tem de vencer a decepção?

Um dos maiores símbolos da resistência à ditadura, dom Pedro Casaldáliga
renunciou às funções de bispo de São Félix do Araguaia (MT) mas continua
acompanhando de perto a vida nacional. Ele se diz decepcionado com o
escândalo que envolve o PT e o governo Lula.
1.O que o senhor está achando da crise que envolve o PT e o governo?

DOM PEDRO CASALDÁLIGA: Às vezes os políticos, os de esquerda também,
justificam os meios pelos fins. O fim, dizem, é o partido no poder, a
serviço do povo. E com isso justificam os meios, e chegam a cair nesses
pecados contra a ética. Não por interesses pessoais, mas por interesses do
partido e do governo, o que não deixa de ser falta de ética.

2.O PT e o governo cometeram esse pecado?

DOM CASALDÁLIGA: Acho que o governo Lula, no que tem de PT, se distanciou
das autênticas demandas do povo. Ficou uma certa cúpula, uma espécie de
vanguarda mais ou menos colegiada, mas as reivindicações do povo, os
movimentos populares, foram vistos de longe.

3.O PT frustrou o eleitor?

DOM CASALDÁLIGA: Amigos me perguntam: e agora? Eu me recordo que o slogan
era: a esperança vence o medo. Agora, terá de ser: a esperança vence a
decepção.

4.O senhor acha que será possível vencer a decepção?

DOM CASALDÁLIGA: A esperança sempre é uma última palavra. Não vamos parar, o
povo continua caminhando, há muita vontade, há muita utopia ainda. Não vamos
parar na decepção, não. Tocamos para a frente, apanhando e aprendendo. E
recordando que alianças demais acabam sendo concessões demais e claudicações
demais.

5.O senhor acha que o problema foi das alianças que o governo Lula fez?

DOM CASALDÁLIGA: Em grande parte, não ao todo, mas em grande parte.

6.E as acusações contra José Dirceu e toda a cúpula do PT ligada a ele?

DOM CASALDÁLIGA: É uma cúpula que se distanciou do povo e dos movimentos
populares, da base.

7.Esse foi o problema: a cúpula se voltou para o projeto de poder do partido?

DOM CASALDÁLIGA: E quiseram justificar meios espúrios com um fim bom, que é
o povo. Mas o fim nem sempre justifica os meios.

8.Como o senhor recebeu a notícia da suposta existência do mensalão?

DOM CASALDÁLIGA: Vulgarizaram a política. Está a se exigir cada vez mais uma
reforma política que, inclusive, exija fidelidade partidária. Existem
políticos importantes no Congresso que passaram por cinco, seis partidos.
Assim não tem seriedade alguma, acaba sendo brincadeira.

9.E a compra de votos?

DOM CASALDÁLIGA: É absurda e imoral, e a negação de um trabalho partidário.

10.Isso causa decepção?

DOM CASALDÁLIGA: Eu não esperava milagres, mas esperava uma mudança de rumo.
Infelizmente, existe ainda um problema maior, que está sendo deixado de
lado, que é a opção economicista feita por este governo, em continuidade com
os outros governos. Estamos servindo ainda ao FMI e ao Banco Mundial,
continuamos submetidos a uma política neoliberal, na alta de juros, no
pagamento da dívida externa, e na obediência cega ao FMI.

11.A decepção é maior pela falta de ética na política ou pelo problema
econômico?

DOM CASALDÁLIGA: As duas. As duas são falta de ética e as duas são a negação
dos verdadeiros interesses e necessidades do povo.

Fonte: Jornal O Globo Rio de Janeiro- 24/07/2005

*Luiz Inácio Fausto da Silva?*

Paulo Nogueira Batista Jr.*

Jornal do Brasil

 Tudo  vaza. Em jantar recente com alguns governadores e ministros,
o presidente da  República teria se queixado das pressões que vem
sofrendo. E desabafou: ”Não  vou vender a alma ao diabo para me
reeleger”. Foi o que publicou a Folha de  S.Paulo, com base em relato
de um dos comensais. No dia seguinte, um dos  principais colunistas do
jornal provocou: ”Já

vendeu, Lula, já vendeu”.

    O desabafo do presidente é  sintomático. A observação do jornalista
pode parecer válida, mas perde o  essencial.

   A essa altura, parece claro que houve  um acordo em 2002 entre o
candidato que sairia vitorioso e os donos do poder,  para usar a
expressão de Raymundo Faoro. Esse acordo consistia essencialmente no  
seguinte: os donos do poder (os principais bancos, interesses
financeiros  estrangeiros, proprietários dos meios de comunicação de
massa, grandes empresas não-financeiras etc.) não oporiam resistência
cerrada à eleição de Lula. Este,  por sua vez, assumiria o compromisso
de manter intocadas as políticas  macroeconômicas e financeiras.

    Esclareço, leitor, que essa é apenas  uma interpretação, nada mais
do que isso. Não tenho informações de bastidor –  nem indiretas. Mas a
interpretação não é plausível? Uma negociação desse tipo só  é possível
porque existe uma grande concentração do poder real em poucas mãos.  Os
setores hegemônicos, entre os quais cabe destacar o establishment
financeiro  e os grupos de mídia, têm as suas divergências de interesse
e percepção. Os  donos do poder nunca constituem um bloco perfeitamente
homogêneo. Mesmo assim, o  número de atores relevantes é pequeno e eles
conseguem se coordenar minimamente  em questões decisivas. Em
determinadas circunstâncias, eleições presidenciais  podem converter-se
em uma gigantesca encenação.

    O acordo de 2002, tudo indica, está  sendo cumprido à risca. O
fiador é o ministro da Fazenda, obviamente. Quase  todos os postos-chave
no ministério da Fazenda e no Banco Central foram  preenchidos, desde o
início do governo, por técnicos e financistas perfeitamente  
enquadradosno regime anterior. Com poucas exceções, todos eles poderiam
ter  sido nomeados (alguns inclusive foram) para funções de destaque nos
governos  Collor e FHC. As poucas substituições ocorridas até agora
obedeceram rigorosamente ao mesmo figurino. No que diz respeito a esse
aspecto crucial do  governo – a área econômico-financeira – as promessas
de mudança feitas na  campanha foram sumariamente revogadas no ”tapetão”.

    Esse teria sido, então, o pacto  faustiano. Com uma diferença
importante, porém. Nas circunstâncias da política  brasileira, ”a
venda” de 2002 não tem a irreversibilidade dos pactos com o  demônio.
Não que o diabo não seja tão feio como o pintam. É que a eleição de  
2006 é outra partida e outra negociação.

    Essa partida já começou. Até poucos  meses, Lula parecia imbatível
em 2006. Estourou então a crise política.  Iniciou-se bombardeio pesado
contra o governo no Congresso e nos meios de  comunicação. O governo
entrou no seu ”inferno astral”.

    Motivos para criticar o governo não  faltam, é claro. Mas grande
parte das críticas nada tem de inocente. Estão  inseridas em um
movimento cujo objetivo é, no mínimo, trazer o presidente para a  mesa
de negociação.

    Lula não é o candidato preferido dos  donos do poder para 2006, como
não foi em eleições passadas. A preferência por  algum tucano é nítida.
Mas não apareceram até agora nomes convincentes. Para  eles, a carta
mais atraente seria Fernando Henrique Cardoso, que derrotou Lula  em
1994 e 1998. Mas FHC está bastante desgastado por seu desempenho bisonho
nos dois mandatos que já teve.

    Assim, a reeleição de Lula pode se  revelar inevitável. Pretende-se
então refazer o acordo de 2002. O que se  buscará, no mínimo, é a
garantia de que o status quo será preservado na área  econômico-financeira.

 

Se o presidente vacilar, vão pedir  mais.

Entrevista João Pedro Stedile

"SÓ A MOBILIZAÇÃO POPULAR PODE  TRAZER MUDANÇAS DE RUMOS"

ENTREVISTA DE JOAO PEDRO STEDILE ao jornalista Mario jacoksind, do jornal
Brecha, Montevideo, Uruguay.

  a.. Como você avalia o atual momento brasileiro, depois da saída de José
Dirceu do governo?

  Estamos vivendo uma grave crise. Crise de caráter estrutural pela
continuidade de uma política econômica claramente neoliberal, que apenas
aprofunda os problemas do povo. Crise provocada pelas alianças do governo
com
setores conservadores e suas oportunidades. Crise provocada pela direita e
suas
ligações com o governo Bush, que tem como objetivo derrotar politicamente o
governo Lula. Bush quer ter como resultado a continuidade de um mandato
neoliberal, seja na derrubada ou, na melhor das hipóteses, na garantia do
retorno do governo aos conservadores nas próximas eleições, em 2006. E se o
presidente Lula continuar com popularidade, terão que pelo menos repactuar
com
ele as condições de um segundo mandato ainda comprometido com a manutenção
dos acordos neoliberais.

  A saída do ministro José Dirceu não altera em nada esse quadro. Pelo
contrário, o reforça pois sua saída representa a perda de influência dos
setores petistas que defendiam dentro do governo a volta a um projeto de
desenvolvimento não neoliberal. Quem sai vencedor, por ora, são os setores
neoliberais do governo representados pelo ministro da Fazenda Antonio
Palloci.

  b.. Você acredita que o governo Lula pode ainda retomar a linha
programática
prometida na campanha que o elegeu em outubro de 2002?

  Claro. Mas tudo depende de correlação de forças. Não depende mais de
declarações de boa vontade, nem do presidente, nem de setores do governo e
nem do PT. Depende agora da possibilidade de realizamos mobilizações de
massa
exigindo mudanças na política econômica e uma reforma política ampla para
que o governo Lula não continue refém de suas alianças conservadoras e seus
compromissos com os neoliberais.

  Se não houver mobilizações de massa teremos um governo de natureza
neoliberal.

  c.. Acha que Lula está sendo mesmo desestabilizado pela direita? Em caso
afirmativo, explique como entende o funcionamento do esquema?

O governo está em crise. Mas ainda não se desestabilizou. Como disse acima,
a
direita joga com várias alternativas. A primeira é manter o governo refém de
acordos neoliberais e, na pior das hipóteses, derrubá-lo. Ou então
derrotá-lo politicamente por antecipação para que com sua desmoralização
política, a direita volte a ganhar as eleições em 2006. Esses esquemas de
ofensiva contra o governo e o PT fazem parte de uma articulação que envolve
o
PFL, o PSDB, as áreas influenciadas pela política do governo Bush, como os
serviços de inteligência que operam aqui dentro, em concluio com o monopólio
que exercem nos meios de comunicação de massa. Esse triunvirato é que operou
uma estratégia de desmoralizar o governo para derrotá-lo politicamente.

  d.. E o MST, como vai depois da Marcha de Goiânia a Brasília, que reuniu
12
mil trabalhadores e trabalhadoras?

  O MST fez um acordo com o governo Lula em que o governo se compromete a
retomar o Plano Nacional de Reforma Agrária, garante que vai cumprir seu
compromisso de assentar as 400 mil famílias previstas – até agora assentou
em
torno de 100 mil – e prioriza uma solução para área as famílias acampadas.
Mas a possibilidade de massificar a Reforma Agrária e acelerar a implantação
do Plano depende de mudanças na política econômica. Por isso, o MST se junta
com outros movimentos sociais e forças políticas na Coordenação de
Movimentos Sociais, levantando o coro das exigências de mudanças na política
econômica.

  Sem mudanças na política econômica não teremos Reforma Agrária. E aí
teremos que ampliar nossas mobilizações nos próximos meses.

  5. Você acha que o governo Lula vai cumprir as promessas feitas na área de
Reforma Agrária?

  Isso vai depender também de como o governo vai sair dessa crise política.
Se
o governo encontrar uma saída pela direita, de ampliar seus compromissos com
o
capital internacional, diminuem as chances de implementar a Reforma Agrária.
Mas se o governo for cada vez mais para direita, se afasta também de todo
povo, e não apenas do MST. É o governo que terá que fazer essa escolha
  Nós, do MST, continuaremos com nossa autonomia e aplicando nossa linha
política. Precisamos permanentemente organizar os trabalhadores e
trabalhadoras e mobilizá-los. A única certeza da possibilidade de mudanças,
em qualquer parte do mundo, no Brasil, no Uruguai, na Argentina, na China, é
se os trabalhadores se organizarem de forma independente, se mobilizarem e
lutarem por mudanças
Nunca, nenhum governo deu nada de graça.

CRISE POLÍTICA

Movimentos sociais irão para as ruas contra golpismo e corrupção  CUT, MST, UNE e dezenas de outras organizações preparam mobilização nacional contra corrupção, tentativas golpistas, em defesa de reforma política democrática e de mudanças na economia. Organizações defendem que saída para Lula é fazer uma aliança com o povo e retomar projeto de mudanças.  

Marco Aurélio Weissheimer

São Paulo _ A Central Única dos Trabalhadores, o Movimento dos Trabalhadores Rurais Sem-Terra, a União Nacional dos Estudantes (UNE) e um conjunto de outras entidades organizadas em torno da Coordenação dos Movimentos Sociais (CMS) decidiram desencadear uma mobilização nacional contra a corrupção e o espírito golpista que estaria animando os movimentos da oposição capitaneada pelo PSDB e pelo PFL. A decisão foi tomada após contatos e reuniões realizadas nos últimos dias em Brasília e São Paulo.
Diante da postura defensiva e da relativa paralisia do governo Lula e da direção do PT, agravada após as denúncias do deputado federal Roberto Jefferson (PTB-RJ), a CMS decidiu agir e colocar seu povo na rua. Mas a mobilização não envolverá um apoio incondicional ao governo Lula, defendendo mudanças urgentes nos rumos da política econômica e a implementação de uma reforma política democrática.
 
O diagnóstico geral dos movimentos entende que essas mudanças não tem qualquer chance de ocorrer sem uma ampla mobilização social que leve milhares de pessoas para as ruas. Segundo suas lideranças, será uma mobilização em defesa, não propriamente do governo, mas sim do projeto histórico que levou Lula à presidência da República. _O que não conseguimos fazer em 2002, vamos ter que fazer agora_, resumiu o dirigente do MST, João
Pedro Stédile em uma reunião realizada na sede da CUT, na capital paulista. _Agora é guerra. O que está em jogo é uma disputa de projetos_, acrescentou, definido do seguinte modo a agenda geral da campanha: _somos contra o golpismo e a corrupção; nem o golpismo de FHC e Bush, nem a corrupção; e em defesa de uma reforma política democrática e de mudanças na
política econômica_.
 
Uma lógica golpista em curso?
O presidente da CUT, Luiz Marinho, reforçou a posição de Stélide. _Evidentemente que não temos nenhuma dúvida de que todas as denúncias de corrupção devem ser investigadas. Agora, é preciso lembrar que esse problema da corrupção não surgiu hoje. Ele está sendo utilizado como uma cortina de fumaça para enfraquecer ao máximo o presidente Lula ou mesmo para criar um clima de impeachment. Nós estamos reclamando que há pouca mudança, queremos mais, mas as elites mão toleram sequer essas pequenas mudanças que o governo vem fazendo_, afirmou Marinho, citando como exemplos os programas de incentivo à agricultura familiar e o Pró-Uni. _Não podemos aceitar calados a lógica golpista que está em andamento_, emendou o dirigente da CUT.
 
Na mesma direção, o presidente da UNE, Gustavo Petta, defendeu rigorosas investigações de todas os casos de corrupção e denunciou a tentativa da direita conservadora de desconstituir uma alternativa de governo duramente construída nas últimas décadas. _Essa direita_, assinalou, _apresenta-se hoje como guardiã da ética, mas quando esteve no poder durante o governo FHC esmerou-se em engavetar CPIs e abafar as inúmeras denúncias de corrupção naquele período, em especial durante o processo de privatizações_. _Não podemos cair no canto de sereia da direita brasileira_, acrescentou. _Diante dessa ofensiva, o governo Lula deve fazer as mudanças necessárias no país, mudando os rumos da política macro-econômica e ampliando os investimentos em políticas sociais.

Petta anunciou que no dia 1° de julho, durante o congresso nacional da UNE, em Goiânia, será realizada uma grande manifestação, em conjunto com a Coordenação dos Movimentos Socia is, com partidos políticos de esquerda e com os governadores que apóiam um projeto de transformação para o Brasil.
 
A manifestação de 1° de julho, em Goiânia, deve ser uma entre muitas, anunciaram as organizações. No próximo dia 21, as entidades farão uma reunião ampliada, em Brasília, para a qual serão convidadas entidades como a Conferência Nacional dos Bispos do Brasil (CNBB) e a Ordem dos Advogados do Brasil (OAB), entre outras. Essa reunião discutirá a redação de uma Carta ao povo brasileiro e de uma Carta ao presidente Lula e ao presidente do Congresso Nacional, onde serão apresentados os objetivos da campanha.

Os fatores da crise

_Estamos muito preocupados com o que está acontecendo_, reconheceu Stédile. Para o dirigente do MST, vários fatores se conjugaram e ajudam a entender o atual momento político do país. O primeiro deles, segundo ele, está relacionado aos interesses do capital transnacional, que estaria inquieto com a política externa do governo Lula e com sua influência na América Latina, particularmente em função dos rumos do governo Chávez, na
Venezuela, e do que está ocorrendo na Bolívia e no Equador. O segundo fator diz respeito à política econômica do governo Lula. _Infelizmente, o governo manteve uma política econômica que afeta os interesses do povo brasileiro. Setores da burguesia se aproveitaram do tema da corrupção para tentar desconstituir Lula e colocá-lo de joelhos. A situação é tal que ou o
governo se curva aos tucanos e aos seus aliados internacionais, ou muda sua política econômica e vem para o lado do povo_, sintetizou.

A percepção de que a crise atual tem causas que estão para além do tema da corrupção também foi apontada por Luiz Marinho. O sindicalista identifica um movimento de setores do empresariado, articulado com setores do agronegócio, que está se aliando com a oposição liderada pelo PSDB para evitar um segundo mandato de Lula, com medo de que o projeto do PT e de seus aliados históricos acabe ganhando maior força do que tem agora. _Vá que o Lula desembeste no segundo mandato?_ _ emendou Stédile, apontando o temor que estaria na base das forças de oposição. Ele e Marinho concordaram que a única saída para Lula é romper com os setores que querem hoje fazê-lo prisioneiro. E os movimentos sociais irão para as ruas, em todo o país, tentar evitar que isso ocorra.

O neoliberalismo não era o único caminho

Entrevista com LedaPaulani, professora da USP e autora do recém-lançado“Modernidade e discurso econômico”

Ocandidato que representava a esperança sucumbiu ao medo nahora de escolher seu modelo econômico. É a opiniãode Leda Paulani, professora da USP e autora do recém-lançado“Modernidade e discurso econômico” (Boitempo Editorial),livro no qual analisa as raízes filosóficas eideológicas do que chama de doutrina neoliberal.

Presidenteda Sociedade Brasileira de Economia Política (SEP), elaparticipou da elaboração da “Carta de Campinas”,documento no qual um grupo de economistas de esquerda acusa opresidente Lula e o PT de queimarem o capital políticoconquistado nas eleições para cumprir a agendaneoliberal. “O governo não acreditou em si mesmo. Tevemedo”.

Emseu livro, a senhora descreve a construção da doutrinaneoliberal como um longo processo, de pelo menos cinco décadas,mas o senso comum o associa à queda do socialismo, no fim dosanos 80…

LEDAPAULANI: O neoliberalismo, como doutrina, inicia-se numa reuniãoque Hayek tomou a iniciativa de fazer em 1947 e para a qual chamoutodos os principais intelectuais conservadores da época. Oobjetivo da reunião era rearranjar as forças paradefender o mercado como única instituição capazde preservar a individualidade e a liberdade humanas. Hayek perceberaa avalanche intervencionista e keynesiana que o pós-SegundaGuerra engendrara e, com ela, o ânimo regulatório geralque se instalara. Era preciso reagir e preparar as bases para osurgimento de um capitalismo livre de regras. Por isso oneoliberalismo nasce como doutrina, e não como uma nova teoriaeconômica.

Quala diferença?

LEDA:Ele parte mais da crença de que a sociedade organizada pelomercado é a melhor que o homem já foi capaz deconstruir, do que de uma certeza, fundamentada em conhecimentocientífico, sobre o caráter necessariamente positivo ematerialmente virtuoso dessa sociedade. Mas a Históriaengavetou essas idéias por pelo menos 30 anos. Só emmeados dos anos 70 foram criadas as condições objetivaspara que o neoliberalismo vingasse, sobretudo como políticaeconômica. Como isso coincidiu com o fim do chamado socialismoreal, a relação entre as duas coisas parece imediata,mas trata-se de um equívoco. Na verdade, tem a ver com a criseque o capitalismo atravessa a partir de meados dos 70.

Porque a senhora diz que o capitalismo está em crise?

LEDA:Ocapitalismo está em crise porque hoje, três décadasdepois do início do desmonte dos artefatos keynesianos(estruturas regulatórias, Estado do bem-estar, controle dedemanda efetiva, taxas de câmbio estáveis), o mundo temmenos perspectiva e cresce menos do que nos chamados 30 anos douradosdo capitalismo (do pós-guerra a meados dos anos 70). Alémdisso, foi a crise iniciada no final dos anos 60 e aprofundada nos 70que gerou a massa de capitais ciganos (sem pátria) que buscavalorização financeira e grita pela necessidade dedesregulamentação. A doutrina neoliberal vem aía calhar.

Aque motivos a senhora atribui a adoção por todo o mundoda doutrina neoliberal?

LEDA:Adoutrina neoliberal fala muito de perto ao senso comum. Afirmaçõescomo: “ninguém pode gastar mais do que ganha” etc. podemser verdadeiras no plano doméstico, mas são falaciosasno plano macroeconômico. Elas passam a ser vistas como verdadeporque são de fácil compreensão. Outro fator éa mídia.

Porque o mundo em desenvolvimento adotou esta doutrina, em especial aAmérica Latina?

LEDA:AAmérica Latina mostrou-se como a grande alternativa deaplicação para esses capitais, uma vez que o mundo todoestava em crise e a demanda por crédito estava, de modo geral,muito reduzida. Nesse contexto, encontrar países como oBrasil, com um Estado disposto a se endividar, foi uma dádiva.Claro que mais tarde, quando estoura a crise das dívidas (porcausa da elevação desmesurada dos juros pelos EUA em1979) e as moratórias se sucedem, a difusão dessadoutrina torna-se uma necessidade, sem a qual a ditadura dos credoresque hoje nos submete talvez não fosse tão eficaz. Nosanos 90, a mesma avidez por valorização financeira deum volume de capitais, então muito maior, empurrou os paíseslatino-americanos para aventuras estabilizadoras assentadas em âncoracambial. Os capitais que “garantiram” a retomada da estabilidademonetária foram regiamente pagos e continuam a sê-lo.

Ogrupo de economistas de esquerda afirma na “Carta de Campinas”que a política econômica do governo foi uma escolhapolítica. Por quê?

LEDA:A “Carta de Campinas” é um documento que foi elaboradocoletivamente ao longo do X Encontro Nacional de Economia Política,promovido pela Sociedade Brasileira de Economia Política (SEP)na Unicamp em maio de 2005. A SEP, da qual sou hoje a presidente,nasceu em 1996 pelo esforço de um grupo de professores deEconomia que percebeu o estreitamento do espaço acadêmiconas entidades então existentes para a apresentaçãodas posições heterodoxas. Afirmamos que se tratou deuma escolha porque não concordamos com a tese de que este erao único caminho disponível. Tese que se relacionadiretamente com uma outra, muito corrente na academia, que afirma quesó existe uma ciência econômica verdadeira (aortodoxa), sendo todas as demais visões falaciosas ouultrapassadas. Para repetir as palavras da própria Carta,“alternativas existiam há dois anos e meio como continuam aexistir hoje”, ainda que hoje os custos de uma mudança derota sejam muito mais elevados, depois que o PT e Lula queimaram oimenso capital político de que dispunham no início dogoverno.

Porque o governo Lula teria “dobrado a aposta” na agenda neoliberal?

LEDA:Aí temos várias hipóteses. A que mais meconvence é que o novo governo não acreditou em simesmo. Em uma palavra, teve medo. E como o poder tinha se tornado oprincipal objetivo do grupo dirigente do PT, preferiram nãoarriscar e, infelizmente, trocaram um projeto de naçãopor um projeto de poder.

Emalgum momento, o governo vai alterar sua política econômicapara um modelo menos financista?

LEDA:Não acredito que esse governo seja capaz agora de mudar oque quer que seja, muito menos a política econômica, atéporque agenda do país já está completamentedominada pela questão da sucessão de Lula.

Opaís alcançará suas metas de desenvolvimento coma doutrina neoliberal?

LEDA:Não acredito. Uma primeira e simples razão é quenesse modelo o próprio crescimento aparece como variáveldesestabilizadora e é prontamente enfrentado pela elevaçãoda taxa de juros, que já é a maior do planeta. Alémdisso, com a instabilidade permanente produzida pelo setor externo ecom suas implicações para o comportamento interno daeconomia, não dá para acreditar em qualquer tipo decrescimento que seja sustentado.

Algumpaís do mundo atualmente está agindo na contramãodesta doutrina com bons resultados econômicos?

LEDA:Todos falam da China, mas a China é complicado, porque semprese poderá levantar o argumento de que se trata de um paísque vive sob uma ditadura. Então é melhor tomarmos aÍndia, que fez uma couraça externa combinando forteacúmulo de reservas, câmbio competitivo e controle decapitais e vem crescendo sustentadamente a uma taxa anual da ordem de6% a 6,5% desde 1995. Passou incólume por toda a seqüênciade crises financeiras dos anos 90 que tanto penalizou nossocontinente.

Essespaíses têm um modelo social desejável para oBrasil?

LEDA:Aqui estamos falando strictosensode política econômica. Nada nos obriga, por mudar apolítica econômica, a comprar este ou aquele modelosocial. Acredito na capacidade do Brasil de combinar não sóa retomada do crescimento como o resgate de nossos graus de liberdadee de nossa capacidade de conduzir autonomamente nossos destinos com aconstrução de uma sociedade mais justa e digna, pautadapelo solidarismo e pela recuperação do Estado como umlócus capaz de enfrentar a fúria cega dos capitais.


O Globo
05/06/05

O MST é um movimento autônomo?

Folha de S. Paulo, 23.5.2005, Opinião

O MST é um movimento autônomo?

SIM

Um movimento contra a escravidão

JOSÉ ARBEX JR.

O Movimento dos Trabalhadores Rurais Sem Terra, MST, comemora a sua
maioridade (21 anos) com honra, pompa e circunstância. A marcha sobre
Brasília demonstra, "urbi et orbi", a sua independência frente ao governo
federal, a sua vitalidade como movimento social e o seu compromisso
inarredável de lutar pela reforma agrária.

Não é pouco, especialmente quando políticos e intelectuais até ontem
comprometidos com a luta pela transformação social, hoje, acometidos por
providencial amnésia, negociam sem pudor os próprios princípios no bazar de
cargos e "oportunidades de mercado".
Não pertenço ao MST, não o represento nem tenho procuração para falar pelo
movimento. Mas, como cidadão a ele vinculado por laços de solidariedade,
sinto-me orgulhoso de sua luta, que é histórica em pelo menos dois sentidos.
Primeiro, por ter como objetivo completar a tarefa de abolir a escravidão:
a dos pobres ao capital e a da terra ao latifúndio. Se há um denominador
comum a cinco séculos de Brasil, é o fato de que a maioria pobre nunca teve
acesso à terra. A infâmia do latifúndio marca a história com o látego do
senhor de escravos: até 1850 a terra era monopólio da Coroa; depois, foi
dividida entre a nobreza, os capitalistas brancos europeus e quem mais
pudesse pagar; no século 20, foi invadida e grilada por coronéis e empresas
internacionais; e agora é entregue à sanha do "moderno" agronegócio,
aliança entre fazendeiros e meia dúzia de transnacionais que dominam a
agricultura brasileira.
Nunca a terra pertenceu ao negro alforriado, ao mestiço miserável, ao
branco marginalizado. O latifúndio, produtivo ou não, é sinônimo de atraso,
por criar desigualdade, concentração de renda, fome -ou "subnutrição", como
preferem alguns de nossos doutores-, êxodo rural e tudo o que ele implica
de nefasto. Pois bem, o MST quer abolir o latifúndio, como condição
indispensável para resolver o problema da pobreza e da desigualdade, e
impulsionar uma transformação social de grandes proporções.
Não, caro leitor, não é o comunismo. As grandes potências capitalistas do
planeta -a começar dos Estados Unidos e França- promoveram a distribuição
de terra e investiram no trabalho livre. Aliás, por isso se transformaram
em potências.
Segundo, a luta do MST é histórica por estar fazendo história. Nunca um
movimento de camponeses organizado em escala nacional durou tanto nem criou
tantos vínculos capilares com a sociedade civil. A elite sempre foi
eficiente quando se tratou de isolar e dizimar os movimentos populares
(basta lembrar Palmares, Canudos, as ligas camponesas, a Ultab, o Master e
tantos outros).
O MST sobrevive com a teimosia e o atrevimento de quem sabe que a sua luta
tem dimensão épica, faz parte da batalha mais geral pela emancipação
nacional. Por isso, mantém alianças com o conjunto de movimentos sociais,
organizações de trabalhadores, sindicais, populares e intelectuais que não
abandonaram a perspectiva de fazer do Brasil um país soberano.
Graças ao serviço de permanente desinformação praticado pela mídia, poucos
sabem que o MST mantém 1.300 escolas de ensino fundamental e emprega 3.000
educadores que cuidam de 160 mil crianças e adolescentes. Por meio do
convênio Brasil Alfabetizado, acertado com o MEC, cerca de 30 mil adultos
foram alfabetizados, com o auxílio de 2.000 educadores populares
voluntários. Outros 300 educadores trabalham com crianças de até seis anos
nas "cirandas infantis", que funcionam nos assentamentos e acampamentos.
Esse trabalho mereceu o Prêmio Unesco de Excelência Pedagógica.
Em janeiro passado, o MST inaugurou a primeira universidade popular do
Brasil, em Guararema, a 60 km de São Paulo -para horror de certos doutores
preconceituosos, incapazes de aceitar a idéia de que o "populacho" possa
organizar um centro produtor de conhecimento de alto nível e rigor
científico. A sua sede foi construída com trabalho voluntário e com
dinheiro oriundo de contribuições de organizações, artistas e intelectuais
brasileiros e estrangeiros (incluindo Sebastião Salgado, Chico Buarque e
José Saramago). Não por acaso, a universidade foi batizada com o nome de
Florestan Fernandes e saudada, no dia de sua inauguração, por Antonio Candido.
O MST, mundialmente reconhecido, respeitado e admirado, só conseguiu
realizar tanto por ser autônomo em relação aos partidos políticos e a
quaisquer outras instituições estranhas aos assentamentos e acampamentos
que constituem a sua base e a sua vida. Não se submete, portanto, ao jogo
de alianças, acordos espúrios, conveniências eleitorais, cálculos e táticas
arquitetado nos gabinetes obscuros dos palácios. O MST só não é autônomo em
relação ao conjunto da nação oprimida. Ao contrário: a ela, somente,
subordina-se e atrela o seu destino.
Senhores da terra, é muito fácil acabar com o MST. Basta realizar a reforma
agrária.

———-
José Arbex Jr., 47, jornalista, doutor em história pela USP, é editor
especial da revista "Caros Amigos" e autor de "Showrnalismo – a Notícia
como Espetáculo" (editora Casa Amarela).
@ – arbex@uol.com.br

 
Nao – A dependência oculta
JOSÉ DE SOUZA MARTINS

O MST não é uma organização política autônoma nem é um movimento social que
disponha, por isso, da independência própria dessa forma de manifestação
das demandas sociais. Mas é uma importante expressão do que vem se tornando
a política na modernidade anômala dos países de grandes desencontros entre
o desenvolvimento econômico e o desenvolvimento social, como o Brasil.
Países em que populações retardatárias da história emergem nas brechas do
sistema político e apresentam, de forma ritualmente tradicionalista, suas
demandas sociais aparentemente extemporâneas. Estamos em face da realidade
política de populações que tentam fazer um acerto de contas com a história.
Justamente porque sua data histórica sugere que suas demandas são demandas
atrasadas e fora de época é que a organização assume a aparência de uma
autonomia que não é real. De modo que, mesmo com seus aliados mais
importantes, de cujas organizações são, hoje, suportes fundamentais, como o
PT e a igreja, pode manter uma relação de estranhamento crítico que se
manifesta em cobranças, como essas da marcha do MST sobre Brasília. Mas,
chegam lá, o presidente veste o boné mais uma vez e os ministros dizem que
já está tudo certo e arranjado. A reivindicação oculta da marcha atendeu a
uma necessidade do governo: dar visibilidade para os seus êxitos, ainda que
limitados, na questão agrária, muito aquém do anunciado. Sobretudo mostrar
um governo aberto às reivindicações camponesas.
O MST é certamente uma organização constitutiva do Partido dos
Trabalhadores, uma base do partido. Sem a Pastoral da Terra -da qual o MST
se origina- e sem o MST, dificilmente o PT teria se expandido tão
extensamente no interior e dificilmente se tornaria o único partido
brasileiro com uma ampla base rural e popular. Em termos da extensão
territorial de sua presença, o PT é muito mais um partido rural do que um
partido operário.
Quando, na campanha eleitoral de Lula à Presidência, essa organização
decidiu refrear suas manifestações e as ocupações de terra, fê-lo
exatamente para não prejudicar a candidatura petista, para não a carimbar
com nenhum timbre de radicalismo. O calendário das agitações no campo
regulado pelo calendário eleitoral, não só nesse caso, tem sido uma boa
indicação do vínculo partidário da organização.
O MST é também uma das principais e mais interessantes expressões políticas
do catolicismo pós-conciliar na América Latina. Ele se constituiu a partir
de quadros das pastorais sociais. Foi quando começou a ficar evidente que
mesmo os bispos chamados progressistas tinham limites claros para se
envolverem na pastoral de suplência que resultou do profundo compromisso da
Igreja Católica com os trabalhadores rurais. Era o cenário histórico da
ditadura militar, da violência genocida e da violação radical da própria
condição humana, sobretudo na chamada Amazônia Legal, mais da metade do
território brasileiro.
A busca de alternativas e o posicionamento político dos agentes de pastoral
envolvidos na arregimentação e no protesto das vítimas pediu também uma
opção política radical. Esse era o limite dos bispos com o fim da ditadura.
O canal de expressão dessa mobilização camponesa teria que ser outro. O
nascimento do MST foi o meio de fazer fluir para o âmbito próprio da
política o que já não tinha condições de se organizar e expressar
plenamente no âmbito da igreja.
O MST se tornou de vários modos expressão do catolicismo militante, pelo
apoio moral, logístico e material. Importou da igreja formas litúrgicas de
manifestações de massa, expressões ampliadas das romarias da terra,
variantes políticas das procissões religiosas. O MST não se move apenas com
base em ideologia política, mas sobretudo com base na mística milenarista
de um tempo de redenção dos pobres e oprimidos.
Porém a principal herança que o MST recebeu da igreja, e seguramente a mais
interessante, é a da grande tradição do pensamento conservador, aquele modo
de pensar o mundo que, no século 19, opôs-se ao liberalismo da revolução do
século 18, como mostrou Robert Nisbet. No lugar do indivíduo fragmentário,
a concepção de pessoa; no lugar da sociedade da sociabilidade abstrata e
interesseira, a comunidade da sociabilidade solidária e afetiva. Os valores
que norteiam o MST vêm desse estoque de idéias conservadoras: a propriedade
da terra, o trabalho comunitário, a religião, a família, a comunidade. De
fato, ele está muito longe do marxismo. E muito longe da independência: o
MST até hoje não tem uma compreensão objetiva de seu lugar na história,
justamente porque não tem autonomia.

El MST y la otra humanidad posible

 

 
Leonardo Boff

Alai

Que el Movimiento de los Sin Tierra (MST) lucha por la reforma agrariatodos sabemos. Que para el Movimiento, la Tierra no es solo, comoquiere la cultura capitalista, un medio de producción, sino que esmucho más, es nuestra Casa Común, está viva, con una comunidad de vidaúnica y que nosotros somos sus hijos e hijas con la misión de cuidar deella y de liberarla de un sistema social consumista que la devasta,esto es lo sorprendente. Este es su mayor sueño, expresión del nuevoparadigma civilizatorio y emergente.

El Movimiento deja atrás el discurso académico que se orientaexclusivamente por la razón instrumental-analítica, funcional al modode producción actual que está amenazando el futuro común de la Tierra yde la Humanidad. Captar esta novedad del MST y de Vía Campesina escaptar su fuerza de convocatoria para Brasil y para toda la sociedadmundial.

Ellos se encuentran a la cabeza de la visión alternativa de que otrahumanidad es posible. Con sus prácticas, no obstante aquí y allá, lascontradicciones inherentes al proceso histórico, está mostrando suviabilidad. Basta observar, con ojo atento, lo que dicen, cómo seorganizan y lo que hacen.

Las víctimas del orden vigente dan sustento a un sueño nuevo. Hacedías, yo y mi compañera Marcia, que apoya al MST desde su fundación enel campamento Ronda Alta-.RS, pudimos participar en la marcha deGoiania a Brasilia. Fueron dos días de convivencia y de marcha con los12.272 caminantes. Se precisa mucha acumulación de concienciasolidaria, de disciplina y de sentido de bien común para hacerfuncionar ese proceso popular multitudinario con más perfección que unaescuela de samba carioca.

No hablemos de la comida puntualísima, del montaje y desmontaje de lascarpas, del agua potable abundante y del servicio sanitario. Lapreocupación ecológica era casi obsesiva. Si alguien, al día siguiente,quisiese saber dónde acamparon aquellas miles de personas, no lo sabríaporque la limpieza era tan minuciosa que ni siquiera un trozo de papelquedaba atrás.

Entre los objetivos explícitos de la caminata, más allá de la reformaagraria y de la discusión de un proyecto popular para Brasil, había elde “desarrollar actividades de solidaridad para fortalecer la lucha ylos sueños del pueblo”. En función de eso, por más de dos horas, a latarde, se promovían exposiciones transmitidas por la radio interna,seguidas de grupos de discusión. A mí se me solicitó hablar sobre lanueva visión de la Tierra y cómo cuidar de ella, a la luz de lassugerencias de la Carta de la Tierra. Pasando por los grupos vi laseriedad con la que se discutía. Pero no solo eso. La marcha se propuso“rescatar y promover la cultura brasileña a través de canciones,poemas, teatro y otras manifestaciones típicas del pueblo”. Al seracogidos en su carpa por el grupo de Paraná (más de 800 personas),oímos canciones y poemas de rara belleza. Una estrofa decía: “oigan laarmonía de igualdad del hombre pobre”. Si el sistema nos aturde, portodos los medios, con palabras “acumulación, consumo, riqueza, placer”,aquí, lo que más se oía era “solidaridad, cooperación, justicia, hombrey mujer nuevos, nueva Tierra”. ¿Quién está en el mejor camino?

Yo reflexionaba conmigo mismo: seguramente Marx, Lenin y Mao jamáspensaron en un tipo de revolución que hiciera esta síntesis tan felizentre lucha y estudio, caminata y fiesta. Un movimiento que incorporapoesía y música será invencible. El MST nos señales que otro mundo estáa punto de emerger. (Traducción de ALAI)

* Leonardo Boff es teólogo.

Esta noticia ha sido recogida de www.rebelion.org