El sistema inmune nos abraza.

El sistema inmune nos abraza.

Y si en vez de poner el foco en “el bicho”… lo ponemos en nuestro sistema inmunológico?

Siempre nos han enseñado que “el sistema inmune se defiende”, como si nuestro cuerpo se tratara de una guerra contra virus y bacterias. La realidad es que, cuando nuestro sistema inmune se activa, los macrófagos, abrazan el “cuerpo extraño” para integrarlo y poder reconocerlo en el futuro. Así, cuando volvamos a entrar en contacto con este “cuerpo extraño”, nuestro sistema inmune lo reconocerá y generará una respuesta inmunitaria más “específica”, y más “amable”.

Igual deberíamos plantearnos poner el foco en cuánto de capaz es nuestro cuerpo de acoger “cuerpos extraños” y abrazarlos, en vez de “defenderse” de ellos…

El tubo digestivo tiene un papel fundamental en todo este proceso. Estamos llenos de virus, bacterias, arqueas, hongos, protozoos… que conforman nuestra microbiota. La microbiota del tubo digestivo determina la del resto de nuestro cuerpo (vagina, pulmones, piel, mucosas, tejido conjuntivo...) El estilo de vida que llevamos ha hecho que, cada vez tengamos menos biodiversidad dentro de nuestra. No es comparable la biodiversidad en la microbiota de los Yanomami (tribu del Amazonas), con la de cualquier persona de occidente.

Tenemos todo un ecosistema dentro de nosotras que, cuanto más diverso es, mayor capacidad tiene de autorregularse.

El estado de nuestro tubo digestivo será indicativo de cuánto de inflamadas/os estamos por dentro, y la capacidad que tenemos de inmunorregular.

¿Qué quiere decir inmunorregular?

El sistema inmune se puede alterar por “exceso” de activación, -reconocer sustancias como extrañas sin que aparentemente lo sean (alergias y/o enfermedades autoinmunes“; o por “defecto”, es decir, no ser capaz de activarse lo suficiente ante un cáncer o una infección.

La salud no se consigue con fármacos ni con vacunas. Cuídemonos.

Convirtámonos en agentes activos en nuestros procesos de salud y empoderémonos en ella… Dejemos de delegar nuestra salud a la autoridad médica o instituciones sanitarias.

Hagamos de la salud un eje transversal en nuestras vidas, una herramienta de transformación social.

Alba Campos Lizcano

Enfermera especialista en Enfermería Familiar y Comunitaria.

Psiconeuroinmunóloga.

Experta en Nutrición clínca y salud nutricional.

Experta en Gestión emocional, coaching y PNL.

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