Bernardo Mançano Fernandes

A crise atual da inflação dos preços de alimentos na maior parte do mundo derruba dois mitos. 1 – O agronegócio é o grande produtor de alimentos; 2 – A fome e a desnutrição são causadas pelo fato da população não ter dinheiro para comprar alimentos e não pela falta de alimentos, que estariam sobrando.

O agronegócio produz apenas uma parte dos alimentos a outra parte é produzida pela agricultura camponesa ou familiar ou pequenos produtores ou sitiantes, como possam ser chamados os produtores não capitalistas. Essa parte no geral significa metade e no particular significa mais ou menos da metade. O agronegócio pode produzir mais cana, mas são os camponeses que produzem mais café e leite. O agronegócio pode produzir mais soja, mais são os camponeses que produzem mais feijão, mandioca, cebola e banana.

 

Para esconder essas diferenças os ideólogos do agronegócio construíram a imagem do agronegócio como totalidade e, nesta lógica, o campesinato seria parte do agronegócio. Nesta lógica perversa, o agronegócio controla 70% dos territórios produtivos, 90% dos recursos públicos para financiamento e produz somente 50 %. E se projeta como mais competitivo que o campesinato que controla somente 30% dos territórios produtivos, apenas 10% dos recursos públicos de crédito e produz 50% dos alimentos. Na verdade, agronegócio e campesinato são sistemas distintos definidos por relações sociais diferentes: capitalistas e não capitalistas. Enquanto o agronegócio concentra, o campesinato distribui.

A crise atual derruba dois mitos e revela que o agronegócio é uma farsa. A lógica das empresas capitalistas, autodenominada agronegócio, é produzir mercadorias e não alimentos. Se as mercadorias podem ser também alimentos, nem sempre os alimentos podem ser mercadorias. Não se pode pensar a soberania alimentar a partir da lógica das empresas capitalistas, porque elas não têm a preocupação de garantir o direito à alimentação. Essa preocupação é do Estado e da Sociedade.

A falta de alimentos no mundo tem duas razões, aumento do consumo maior que o aumento da produção de alimentos. Não estou ressuscitando a teoria de Malthus da progressão geométrica do crescimento da população e da progressão aritmética do crescimento da produção de alimentos. Temos terra, gente e tecnologia para produzir alimentos em abundância para todos. Todavia, o grau de concentração da riqueza, das terras, das tecnologias e dos conhecimentos é tão intenso que produziu a crise atual.

A crise atual é resultado de quase duas décadas de políticas neoliberais que controlam o Estado, dominam ministérios e defendem os interesses das empresas capitalistas em detrimento dos interesses da sociedade. É preciso recuperar o Estado, os ministérios e as secretarias das mãos dos tecnocratas do neoliberalismo para que possamos desenvolver políticas de interesses da Nação e não as políticas de interesse do patrão. A implantação de uma política de soberania alimentar é urgente para que os efeitos da crise atual sejam minimizados. O agronegócio controla hoje no Brasil 300 milhões de hectares, todavia utiliza apenas 120 milhões. Restam 180 milhões de hectares para serem utilizados na reforma agrária voltada para a produção de alimentos.

A crise atual tende a aumentar com a ampliação das monoculturas para a produção de agrocombustíveis. O planejamento territorial é urgente para evitar um colapso. É preciso definir limites para as diferentes culturas e garantir o desenvolvimento. Estamos diante de um grande desafio: romper com as políticas que promovem a concentração da população nas grandes cidades e concentram as terras no campo; é preciso defender políticas que democratizem o acesso à terra, ao conhecimento e às riquezas. Esse desafio possui diferentes escalas. Na escala nacional as políticas de soberania alimentar garantem o abastecimento interno e na escala internacional as políticas protecionistas precisam ser equivalentes entre os países pobres e os países ricos. Isso significa o fim da Organização Mundial do Comércio que não tem competência para defender os interesses das nações. Os interesses do comércio não podem estar acima dos interesses da soberania.

A crise atual é um indicador de uma nova etapa da história. A etapa pós neoliberal. Como afirmou o líder camponês francês José Bové: o mundo não é uma mercadoria.

 

Bernardo Mançano Fernandes: Geógrafo, professor do Programa de Pós-graduação em Geografia da Universidade Estadual Paulista – UNESP, campus de Presidente Prudente; coordenador do Núcleo de Estudos, Pesquisas e Projetos de Reforma Agrária – NERA; Pesquisador do Conselho Nacional de Desenvolvimento Científico e Tecnológico – CNPq; coordenador do Grupo Trabalho Desenvolvimento Rural na América Latina e Caribe do Conselho Latino-americano de Ciências Sociais – CLACSO.

Una respuesta a la Crisis Global de los Alimentos: ¡Los/as campesinos/as y pequeños agricultores pueden alimentar al mundo!

           

Los precios de los cereales en el mercado mundial están subiendo. Los precios del trigo han aumentado un 130% en el periodo de marzo 2007-marzo 2008[i]. Los precios del arroz aumentaron casi un 17% en el 2007 y aumentaron otro 30% en marzo del 2008. Los precios del maíz subieron un 35% entre marzo del 2007 y marzo del 2008 (1). En los países que dependen mucho de la importación de alimentos, algunos precios han subido dramáticamente. Las familias pobres ven que suben los recibos de la comida y que no pueden ya hacer frente a los gastos para comprar lo mínimo necesario. En muchos países los precios de los cereales se han doblado o triplicado durante el año pasado. Los gobiernos de estos países están bajo mucha presión para hacer accesible la comida a un precio razonable. El gobierno de Haití ya se ha encontrado con este tema. Y en numerosos otros países (ej. Camerún, Egipto, Filipinas…) están teniendo lugar fuertes protestas. 

 

La crisis actual: una consecuencia de la liberalización de la agricultura

Algunos analistas han estado culpando exclusivamente a los agrocombustibles, a la creciente demanda mundial o al calentamiento global de la actual crisis alimentaria. Pero en realidad, esta crisis también es el resultado de muchos años de políticas destructivas que socavaron las producciones nacionales de alimentos, y obligaron a los campesinos/as a producir cultivos comerciales para compañías multinacionales (TNC) y a comprar sus alimentos de las mismas multinacionales (o a otras…) en el mercado mundial.

            En los últimos 20-30 años el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional (FMI), y posteriormente la Organización Mundial del Comercio (OMC) han forzado a los países a disminuir su inversión en la producción alimentaria y su apoyo a los/as campesinos/as y pequeños agricultores, que son las claves de la producción alimentaria. Sin embargo los pequeños productores son los productores claves de alimentos del mundo.

Los donantes internacionales principales muestran la falta de interés en la producción de alimentos. La cooperación al desarrollo de los países industrializados hacia los países en vías de desarrollo ascendió de 20 mil millones de dólares (1980) a 100 mil millones de dólares (2007). La aportación para la agricultura, sin embargo, descendió de 17 mil millones de dólares a 3 mil millones de dólares (2007) (2). Y la mayor parte de estos fondos probablemente no se destinó a la producción alimentaria basada en los/as campesinos/as.

Bajo las políticas neoliberales, consideraron que los fondos de reserva administrados por el Estado eran demasiado caros y los gobiernos tuvieron que reducirlos y privatizarlos. Por ejemplo Bulog, la compañía estatal de Indonesia que se fundó para regular los fondos de reserva, se privatizó en 1998 bajo las políticas del Fondo Monetario Internacional. Bajo la presión de la OMC las juntas estatales del mercado han sido desmanteladas, porque se considera que van contra el principio de “libre” comercio. Los tratados de la OMC han forzado a los países a “liberalizar” sus mercados agrícolas: reducir tasas a la importación (¡lo cual fue una pérdida importante de ingresos para los países importadores!) y aceptar importaciones de al menos el 5% de su consumo interno, incluso aunque no las necesitara. Al mismo tiempo, las multinacionales han seguido haciendo dumping con los excedentes en sus mercados, utilizando todas las formas de subsidios directos e indirectos a la exportación.  Además, los gobiernos nacionales no han logrado  estabilizar sus mercados y proteger a los agricultores y consumidores de las fluctuaciones repentinas de los precios.

 

Las políticas neoliberales han destruido la capacidad de los países de alimentarse a sí mismos.

Después de 14 años del NAFTA (Tratado de Libre Comercio de Norte América) México pasó por una gran crisis, llamada con frecuencia la “crisis de la tortilla”. De ser un país exportador, México pasó a ser dependiente de la importación de maíz de Estados Unidos. Actualmente México importa el 30% de su consumo de maíz. Hoy en día, las crecientes cantidades de maíz de los EEUU fueron súbitamente derivadas a la producción de agrocombustibles. Las cantidades disponibles para los mercados mexicanos disminuyeron, provocando un aumento de precios.

En 1992, los agricultores de Indonesia produjeron soja suficiente para proveer el mercado doméstico. El tofu hecho con soja y el ‘tempeh’ son parte importante de la dieta diaria en todo el archipiélago. Siguiendo la doctrina neoliberal, el país abrió sus fronteras a los alimentos importados, permitiendo que la soja barata de EE.UU. inundara el mercado. Esto destruyó la producción nacional. Hoy, el 60% de la soja que se consume en Indonesia es de importación. Los precios récord del pasado enero de la soja de EE.UU. condujeron a una crisis nacional, cuando el precio del ‘tempeh’ y el tofu (la “carne de los pobres”) se dobló en pocas semanas.

Según la FAO, el déficit alimentario en el oeste de África aumentó un 81% en el periodo de 1995-2004. En este periodo la importación de cereales aumentó un 102%, la de azúcar un 83%, los productos lácteos un 152% y las aves un 500%. De acuerdo con el FIDA (2007), sin embargo, esta región tiene el potencial de producir alimentos suficientes. Y por todo el mundo, a pesar de que aumenta la vulnerabilidad de los países la liberalización avanza: La Unión Europea está forzando a los países de la ACP al llamado Acuerdo de Colaboración Económica, para liberalizar el sector agrícola con efectos adversos predecibles para la producción alimentaria.

 

El boom de los agrocombustibles: un impacto repentino en los mercados mundiales

La emergencia de los agrocombustibles es otra de las causas del aumento de precios de los alimentos. Durante los últimos años, las multinacionales y los poderes económicos mundiales, como EE.UU. y la UE, han desarrollado rápidamente la producción de agrocombustibles. Subsidios e inversiones masivas se están dirigiendo hacia este sector en auge. Con el resultado de que las tierras están pasando en poco tiempo masivamente de la producción de comida a la producción de agrocombustibles. Y una parte importante del maíz de EE.UU ha “desaparecido” repentinamente, pues fue comprada para la producción de etanol. Esta explosión incontrolada del sector de los bio-combustibles causó un gran impacto en los ya inestables mercados internacionales de la agricultura. Egipto, uno de los mayores importadores de cereales, ha reclamado a EE.UU y a la UE que detengan el crecimiento de la producción de maíz y otros cultivos para los agrocombustibles. En Egipto los precios de los alimentos, incluyendo el pan subvencionado, subieron cerca de un 30% el año pasado (4). En Filipinas, el gobierno se está fijando en 1,2 millones de hectáreas para la producción de jatropha en la isla del sur, Mindanao, mediante la Compañía Nacional del Petróleo de Filipinas – Corporación de Combustibles Alternativos. También está identificando más de 400,000 hectáreas de tierra para inversiones del sector privado. Jatropha curcas es un arbusto no comestible resistente a la sequía. Produce frutos del tamaño de pelotas de golf que contienen un aceite que puede convertirse en agrocombustible. Se esperan impactos sobre la seguridad alimentaria local (5).

 

Especuladores: apuesta por la escasez esperada

La especulación, a menudo eclipsada en los debates públicos, es una de las causas principales de la actual crisis de los alimentos. La producción permanece a un nivel alto, pero los especuladores apuestan en la escasez esperada y aumentan artificialmente los precios.

La producción mundial de grano en 2007/2008 está estimada en 2108 millones de toneladas (un aumento de 4,7% comparado a la del 2006/2007). Esto supera bastante la media de crecimiento del 2% en la pasada década.  El consumo medio de cereales para la alimentación aumentó cerca del 1% anual y alcanzará 1009 millones de toneladas en 2007/2008. El uso para forraje aumentó un 2% hasta 756 millones de toneladas. Y el uso para otros fines será de cerca de 364 millones de toneladas. Una parte importante de esta cantidad es maíz (95 millones de toneladas), y su mayor parte se destina a agrocombustibles. Se espera que EE.UU. utilice 81 millones de toneladas de maíz para etanol, un 37% más que en 2006/2007. Se calcula que las reservas mundiales de cereal disminuyan 21 millones de toneladas (5%) hasta llegar a 405 millones de toneladas al final de la temporada de 2008. Las reservas han ido descendiendo durante muchos años. Ahora las reservas están en su nivel más bajo en 25 años.

Aunque es cierto que durante los últimos años la demanda ha aumentado un poco más comparada con la producción, una política nacional e internacional equilibrada dirigida a la producción alimentaria de cada país podría fácilmente corregir la situación y asegurar precios estables para los/as campesinos/as y consumidores/as.

Las multinacionales y los analistas convencionales predicen que la tierra se utilizará cada vez más para agrocombustibles (maíz, pero también aceite de palma, semilla de colza, caña de azúcar…) Predicen que la media clase ascendiente de Asia comenzará a comprar carne lo cual aumentará la demanda de cereales. Además predicen efectos climáticos negativos para la producción alimentaria, como sequías e inundaciones severas. Mientras tanto, las multinacionales obtienen agresivamente enormes áreas de tierras agrícolas alrededor de las ciudades con fines especulativos, expulsando a los campesinos. En India se han establecido más de 700 así llamadas “Nuevas Zonas Económicas”, expulsando de sus tierras a los agricultores.

 

Basándose en estas predicciones, las multinacionales manipulan los mercados

Los vendedores mantienen sus reservas alejadas del mercado para estimular las subidas de precio en el mercado nacional, creando enormes beneficios. En Indonesia, justamente durante  la subida del precio de la soja en enero 2008, la compañía PT Cargill Indonesia conservaba aún 13,000 toneladas de soja en sus almacenes de Surabaya, esperando a que los precios alcanzaran un record.

 

En muchos países, los grandes supermercados están a punto de obtener el monopolio del poder y aumentan los precios mucho más de lo justificado por la subida de precios de los productos agrícolas. Por ejemplo, en Francia, el precio de ciertos yogures de incrementó un 40% aunque el coste de la leche sólo supone un tercio del precio total. Una subida sustancial de los precios de la leche para los agricultores nunca podría causar tal aumento de precio (3).

 

 

En Alemania, los agricultores han visto cómo los precios que les pagan en la granja por la leche han descendido un 20-30%, llevándoles a la bancarrota. Esto se debe a que los supermercados utilizan productos lácteos baratos como un instrumento de marketing para atraer a los consumidores.

La especulación financiera internacional está jugando un papel muy importante en el aumento de precios de los alimentos desde el verano de 2007. Debido a la crisis financiera de los EE.UU., los especuladores han empezado a cambiar los productos financieros por las materias primas, incluyendo los productos agrícolas. Esto afecta directamente a los precios en el mercado doméstico, pues muchos países dependen cada vez más de la importación de alimentos.

Esto está ocurriendo mientras todavía hay suficiente comida en el mundo para alimentar a la población global. Según la FAO, el mundo podría aún alimentar hasta 12 mil millones de personas en el futuro.

 

Lecciones aprendidas de la crisis: El Mercado no resolverá el problema

La inestabilidad del mercado alimentario internacional es una de las características de los mercados agrícolas: como la producción es de temporada y variable, los aumentos de producción no pueden reconocerse muy rápido, pues los cultivos necesitan tiempo para crecer. A la vez, el consumo no aumenta mucho aunque haya más comida disponible. Las pequeñas diferencias en los suministros y la demanda, las incertidumbres relativas a las cosechas futuras y la especulación en los mercados internacionales pueden crear efectos enormes en los precios. La volatilidad en los mercados alimentarios es debida sobre todo a la desregulación, la falta de control sobre los grandes agentes y la falta de la necesaria intervención estatal a nivel internacional y nacional para estabilizar los mercados. ¡Los mercados des-regulados son una parte crucial del problema!

 

Los/as campesinos/as y pequeños agricultores no se benefician de los altos precios Mientras los especuladores y comercios de gran escala se benefician de la crisis actual, la mayoría de los/as campesinos/as y agricultores no se benefician de los precios altos. Ellos cultivan los alimentos, pero la cosecha a menudo se les quita de las manos: ya está vendida al que presta el dinero, a la compañía de insumos agrícolas o directamente al comerciante o a la unidad de procesamiento.

Aunque los precios que se pagan a los campesinos han subido para algunos  cereales, ese aumento es muy poco comparado con los incrementos en el mercado mundial y a los aumentos que se han impuesto a los consumidores. Si los alimentos del mercado vienen de los productores del país, a menudo los beneficios de las subidas de precios se los llevan las compañías y otros intermediarios que compran los productos de los campesinos y los venden a precio caro. Si los productos vienen del mercado internacional, esto es aún más claro: las compañías multinacionales controlan este mercado. Ellos definen a qué precios se compran los productos en el país original y a que precios se venden en el país que los importa. Aunque en ciertos casos los precios sí que subieron para los productores, la mayor parte de esa subida la cobran otros. Debido al aumento en los costes de producción, en el sector de los lácteos y la carne, los/as campesinos/as ven incluso cómo sus precios bajan mientras que los precios a los consumidores se disparan.

A pesar de algunos aumentos moderador de los precios al nivel de las granjas, los ganaderos  están en crisis debido al aumento de los precios del forraje, y los productores de cereal se enfrentan a grandes aumentos en los precios de los fertilizantes que dependen del petróleo. Los agricultores venden su producción a un precio extremadamente bajo comparado con lo que pagan los consumidores. En Europa, la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) de España calculó que los consumidores en España pagan hasta un 600% más de lo que obtiene el productor por su producción. Números similares también existen en otros países, donde los precios del consumo se definen principalmente por los costes de procesamiento, transporte y venta al público.

 

Entre las víctimas: Agricultores/as, campesinos/as sin tierra y productores de cultivos comerciales

Los trabajadores de la agricultura, así como muchas personas de las áreas rurales también tienen que comprar comida, pues no tienen acceso a tierras en las que producir. Como resultado, la crisis actual les perjudica severamente.

Algunos/as campesinos/as a lo mejor tienen tierra, pero están obligados a producir cultivos comerciales en lugar de alimentos. El incremento del precio del aceite comestible en Indonesia desde 2007 no ha beneficiado a los/as campesinos/as de aceite de palma. Ellos sólo recibieron un pequeño incremento del precio de parte de los grandes compradores, y no entienden porqué la gente de la calle y los consumidores tienen que sufrir precios tan altos para el aceite comestible. Muchos de ellos están trabajando bajo contrato con grandes compañías de negocios agrícolas que procesan, refinan y venden el producto. Un pequeño número de grandes compañías agrícolas ha aumentado los precios domésticos, siguiendo la subida internacional de los precios. El modelo de contrato agrícola provoca que los/as agricultores/as no puedan producir comida para sus familias, pues están obligados a producir monocultivos comerciales, como la caña de azúcar, el aceite de palma, el café, el té y el cacao. Esto significa que incluso aunque los campesinos reciban un pequeño aumento para su cultivo comercial, tienen que pagar mucho más cara la comida en el mercado. Y por tanto, la subida de precios de la comida causa también mayor pobreza en sus familias.

 

Los/as consumidores/as urbanos sufren las consecuencias

Las políticas de liberalización de las últimas décadas han expulsado a millones de personas a las áreas urbanas, donde la mayoría de ellos acaban en barrios pobres, con una vida muy precaria y forzados a vender su trabajo muy barato y a comprar la comida y otros bienes a precio muy alto. Ellos son las primeras víctimas de la crisis actual, pues no tienen modo de producir su propio alimento. Su número ha aumentado dramáticamente y tienen que gastar una gran parte de sus ingresos en comida. De acuerdo con la FAO, en los países en vías de desarrollo la comida representa hasta el 60-80% del gasto de los/las consumidores/as (incluyendo campesinos sin tierra y trabajadores del campo). Las compañías explotan despiadadamente la situación actual, aceptan que un creciente número de personas pasen hambre porque no tienen el dinero para comprar la comida disponible. Los gobiernos se ven forzados a importar alimentos caros para llegar a la demanda de los consumidores y no disponen de los medios para apoyar a los consumidores más pobres

 

Más libre comercio no resolverá la crisis

Algunas instituciones como el Banco Mundial y el FMI, así como algunos gobiernos, están ahora abogando por invertir más en agricultura, por incrementar la ayuda alimentaria para los países pobres importadores de alimentos y liberalizar más los mercados para que los países puedan mejorar sus ingresos mediante la exportación. Muchos argumentan que necesitamos modelos de producción más intensivos, lo que para ellos significa ¡más insumos industriales en la agricultura, incluyendo la introducción de transgenicos y el uso de más energía fósil!

Siguen promoviendo más acceso para sus multinacionales en la Ronda de Doha y condicionar el apoyo financiero extra a criterios políticos para aumentar la dependencia de esos países. Nada dicen sobre la necesidad de una mayor regulación y estabilización del mercado. ¿Y llegará la ayuda que tiene que ir a la producción agrícola basada en los campesinos?. Ellos irán a los países importadores ofreciendo una “ayuda” financiera, invertirán más en la producción alimentaria comercial y seguirán imponiendo la misma receta de desregulación y privatización.

En las negociaciones de la OMC, los precios altos se usan para hacer que los gobiernos acepten futuros recortes de tarifas y una mayor liberalización de los mercados agrícolas. Esto creará la siguiente crisis, cuando las fluctuaciones de los precios vayan en otra dirección.

 

Una salida a la crisis: Reconstruir las economías alimentarias nacionales

Para corregir la crisis actual, La Vía Campesina cree que los países deberían dar prioridad en sus presupuestos a ayudar a los consumidores más pobres para que puedan acceder a suficiente comida. Mientras tanto, deberían dar más importancia a la producción doméstica de alimentos para dejar de ser tan dependientes del mercado mundial.

Sí que necesitamos una producción de alimentos más intensiva, pero intensiva en cuanto al trabajo y al uso sostenible de los recursos naturales. Hay que desarrollar sistemas de producción diferentes, sistemas que no estén enfocados exclusivamente en los cultivos principales como el maíz, la soja, el arroz y el trigo, sino que integren los alimentos locales que han sido olvidados desde la revolución verde… Las familias de pequeños agricultores pueden producir una gran variedad de alimentos que garanticen una dieta equilibrada y algunos excedentes para los mercados. ¡Es una protección contra el hambre!

Los precios del mercado interno deben estabilizarse en un nivel razonable para los campesinos y consumidores. Para que los campesinos puedan recibir precios que cubran los costes de producción y aseguren unos ingresos dignos y para los consumidores, para que estén protegidos de los precios altos. Hay que potenciar la venta directa de los/las campesinos/as y pequeños agricultores a los consumidores. El señor Jacques Diouf, secretario general de FAO, ha afirmado que los países en vías de desarrollo deben poder llegar a la autosuficiencia alimentaria (6).

En cada país hay que establecer un sistema de intervención que pueda estabilizar los precios del mercado. Para conseguirlo, los controles a la importación, con tasas y cuotas, son necesarios con el fin de regular la importación y evitar el dumping o las importaciones baratas que destruyen la producción interna del país. Hay que establecer una reserva de seguridad estatal con el objetivo de estabilizar el mercado interno: en tiempos de excedentes, el cereal puede cogerse del mercado para construir este fondo de reserva y utilizarlo en casos de carestía de cereal.

Por lo tanto, la tierra debería distribuirse de forma igualitaria a las personas sin tierra y a las familias de los/las campesinos/as mediante una genuina reforma agraria y de la tierra. Esta debería incluir el control y el acceso al agua, las semillas, créditos y tecnología apropiada. Debe permitirse a las personas producir de nuevo su propio alimento y sustentar a sus propias comunidades. Hay que impedir que arrebaten y desalojen las tierras y que se expandan las tierras dedicadas a la agricultura de los grandes agro-negocios. Se necesitan medidas inmediatas para apoyar a los pequeños agriculturas y campesinos/as a aumentar su producción agro-ecológica de alimentos.

Los gobiernos nacionales no deben repetir el error de promover que las grandes compañías agrícolas inviertan en unidades de producción masiva de alimentos. Según la FAO, los países de la antigua URSS planean abrir sus tierras a las compañías de agro-negocios para producir comida en la tierra que actualmente no se cultiva. Esto puede convertirse en otro error si se presenta como una solución a la crisis de los alimentos.

 

Regular los mercados internacionales y aplicar derechos básicos

A nivel internacional hay que tomar medidas para la estabilización. Deben establecerse reservas de seguridad internacionales así como un mecanismo de intervención para estabilizar los precios a un nivel razonable en los mercados internacionales. Los países exportadores deben aceptar las normas internacionales que controlan las cantidades que pueden llevar al mercado.

Los países deben tener la libertad de controlar las importaciones para poder proteger la producción nacional de alimentos.

La producción de cereales para agrocombustibles es inaceptable y debe detenerse, pues compite con la producción de alimentos. Como primer paso pedimos una moratoria inmediata sobre los agrocombustibles, como propuso el antiguo enviado especial de la ONU, Jean Ziegler, en relación al Derecho a los Alimentos.

La influencia de las compañías multinacionales debe limitarse y el comercio internacional de materias primas debe llevarse a un mínimo necesario. La producción de cada país debería satisfacer el máximo posible de la demanda interna. Este es el único modo de proteger a los/as campesinos/as y consumidores/as de las fluctuaciones repentinas de los precios provinentes del mercado internacional.

Un posible acuerdo en la Ronda de Doha significará otro impacto para la producción de alimentos basada en los/as campesinos/as; por lo tanto hay que rechazar cualquier acuerdo.

 

Los/as campesinos/as y los pequeños agricultores son los principales productores de alimentos

En La Vía Campesina estamos convencidos de que los/as campesinos/as y los pequeños agricultores pueden alimentar al mundo. Por eso  deben considerarse un elemento clave de la solución. Con suficiente voluntad política y la aplicación de políticas adecuadas, más  campesinos/as y pequeños agricultores podrían producir fácilmente alimento suficiente por un precio razonable. ¡La actual situación demuestra que necesitamos cambios!

¡Ha llegado el momento de la soberanía alimentaria!

 

Jakarta, 24 de Abril 2008

 

 

 

 

Referencias

 

(1) Crop Prospects and Food situation of FAO

http://www.fao.org/docrep/010/ai465e/ai465e00.htm

 

(2) OECD (En Süddeutsche Zeitung 15-4-2008)

 

(3) LEMONDE.FR with AFP  24-02-2008

 

(4)  Biofuel News  20-3-2008

 

(5)  http://www.checkbiotech.org/green_News_Biofuels.aspx?infoId=17206

 

(6) Le Monde 17-4-2008 

Violencia en el campo aumentó 50% en Brasil, afirma CPT

Avance del monocultivo amenaza al cerrado brasileño

Sobrevivientes de Carajás protestan frente a la sede del gobierno

MST ocupa 27 latifundios en Pernambuco

Asesinato de Indígenas en Mato Grosso do Sul aumenta casi 100%

Violencia en el campo aumentó 50% en Brasil, afirma CPT

La violencia sufrida por trabajadores rurales en Brasil aumentó en 50% durante el año de 2007 si se la compara con la del año de 2006. Ésta y otras informaciones constan en el informe Conflictos en el Campo 2007, publicado anualmente por la Comisión Pastoral de la Tierra (CPT). Divulgado en Brasilia el último martes, día 15, el documento revela que el estado de Pará, que siempre es el campeón en muertes en el campo, redujo de 24 para 5 el número de asesinatos en consecuencia de la lucha por la tierra.

 

Lea más.: http://www.radioagencianp.com.br/index.php?option=com_content&task=view&id=4463&Itemid=39

 

Avance del monocultivo amenaza al cerrado brasileño

El agronegocio parece no poseer límites para conquistar lucros. Informaciones recientemente divulgadas por el Instituto Sociedad, Población y Naturaleza (ISPN) en Brasil, revela que 142 mil hectáreas de la zona del cerrado brasileño, con su bioma propio, se transformaron en cañaverales durante la zafra de 2006/2007. Para tener una idea, el área es equivalente al tamaño de la ciudad de San Pablo.

Lea más:  

 

#Sobrevivientes de Carajás protestan frente a la sede del gobierno

Los trabajadores mutilados y las viudas de los agricultores asesinados en la masacre de Eldorado dos Carajás acamparon durante la mañana del lunes, día 7, frente al Palacio de los Despachos en Pará, sede del gobierno del estado. Ellos exigen a la gobernadora Ana Júlia Carepa (PT), el cumplimiento de lo que les fue prometido en 2007).

Lea más: http://www.radioagencianp.com.br/index.php?option=com_content&task=view&id=4411&Itemid=39

 

 

MST ocupa 27 latifundios en Pernambuco

El Movimiento de los Trabajadores Rurales Sin Tierra (MST) ocupó 27 latifundios en el estado de Pernambuco, región nordeste brasileña, desde el fin de semana pasado. En el municipio de Caruaru, región del agreste del estado, aproximadamente 150 familias ocuparon la Hacienda Bananeiras, que estaba abandonada e improductiva. Tres policías armados llegaron al lugar y dejaron el clima tenso. Pero, hasta el momento, no hubo conflicto.

Lea más:  http://www.radioagencianp.com.br/index.php?option=com_content&task=view&id=4461&Itemid=39

 

 

Asesinato de Indígenas en Mato Grosso do Sul aumenta casi 100%

Un informe producido por el Consejo Indigenista Misionero (Cimi) divulgado recientemente alertó sobre la violencia creciente contra los indios en Brasil y apuntó al estado de Mato Grosso do Sul, en el centro oeste del país, como la región más crítica. En 2006, 27 indígenas fueron asesinados en el estado, pero en 2007, este número llegó a 53. Un aumento de 99%. Durante el mismo período, el crecimiento de estos asesinatos en todo el país fue en 64%.

Lea más: http://www.radioagencianp.com.br/index.php?option=com_content&task=view&id=4460&Itemid=39

Informe Semanal (de TVE) informa tendenciosamente sobre los cultivos transgénicos y manipula el documental emitido.

 

Sábado 19 de abril de 2008, Informe Semanal emite un documental sobre los cultivos transgénicos. Casi todos los actores invitados para expresar su versión sobre una tecnología (cuestionada por gran parte de la comunidad científica, organizaciones campesinas, medio ambientalistas y de consumidores de todo el mundo) con grandes riesgos sanitarios, medio ambientales y favorecedora de la privatización de los recursos agrogenéticos, son tendenciosos  hacia un único posicionamiento, que en el caso que nos ocupa, dichos actores idealizaron el uso de la misma.

Para favorecer la tendencia parcial de TVE sobre el tema que nos ocupa, intencionada o no intencionadamente, cortaron de un plumazo la emisión de una de las voces disonantes del documental, no emitiendo la versión del representante de Green Peace Juan Felipe Carrasco.

 

PLATAFORMA RURAL – ALIANZAS POR UN MUNDO RURAL VIVO DENUNCIA:

 

–           La emisión desde la Televisión de Todos de un documental tan tendencioso y parcial, obviando a una parte importante de la sociedad, que tiene otros análisis y posicionamientos  con respecto a los cultivos transgénicos

–           La manipulación vergonzosa del documental cortando una parte fundamental de la información a transmitir

 

 

EXIGIMOS:

 

–           Que se repare el daño causado a las organizaciones y personas que creen y demuestran que los cultivos transgénicos no son ninguna respuesta técnica para solucionar los problemas de la falta de alimentos en el mundo, mediante la emisión de otro documental donde puedan pronunciarse otras versiones sobre la aplicación de dicha tecnología.

 

Os invitamos a enviar cartas al director general de RTVE denunciando el hecho y proponiendo la emisión de otro documental a la siguiente dirección: inf.semanal@rtve.es

 

Un saludo

 

Cristina Sancho Esteban

Secretaría Técnica de Plataforma Rural

Plaza de la Iglesia s/n

34429 Amayuelas de Abajo, Palencia

Tfno.: 979 15 42 19

Email: plataformarural@nodo50.org

Web: www.nodo50.org/plataformarural

 

Vandana Shiva 20 de abril de 2008

 Durante años, el Banco Mundial, a través de una irrepresable política de créditos para la construcción de autopistas, centrales energéticas térmicas y emplazamientos agroindustriales, ha empujado a sus clientes a emitir a la atmósfera más y más gases de efecto invernadero. Jugadores económicos globales, como Cargill, Walmart y otros tiene una responsabilidad al menos tan grande en la progresiva erosión del clima.

Precisamente, la transnacional agrícola Cargill ha sido y sigue siendo un actor clave a la hora de lograr cada vez más terrenos para la plantación de soja en Brasil y de palma de aceite en Indonesia. La empresa es corresponsable de la pérdida de biorreservas imprescindibles, que caen víctimas de los desmontes incendiarios y de las talas masivas de árboles. El modelo del gigante comercial Walmart, consistente en lograr suministros comerciales al detalle a grandes distancias gracias a un sistema centralizado, es también una receta infalible para cargar a la atmósfera con dióxido de carbono. Parece, pues, ineludible analizar los factores reales y llamar por su nombre a los actores reales a los que hay que agradecer la presente situación. ¿A quién y a qué me refiero? Desde luego, a un gigantesco agronegocio de alcance planetario; desde luego, a la Organización Mundial del Comercio (OMC) y al Banco Mundial, así como a la sistemática destrucción de los modos agrarios tradicionales de producir, que a menudo sucumben a una desapoderada urbanización.

 

30% más de gases de efecto invernadero

Otro camino errado, a la hora de contener el cambio climático, es la exigencia de biocombustibles producidos a partir del maíz, la soja, la palma de aceite y la jatrofa. No deberíamos olvidar que los combustibles derivados de la biomasa siguen siendo los más importantes para los pobres y los más que pobres. Piénsese en la biomasa no comestible utilizada para cocinar, como el estiércol de vaca, o los restos de hortalizas o de madera procedentes de las selvas pluviosas o de otros bosques. Los biocombustibles industriales no son, desde luego, combustibles de pobres, pero, sin embargo, convierten sus medios de alimentación en calor, electricidad y energía para el transporte. La producción de etanol y biodiesel da hoy lugar a sectores en rápido crecimiento, que se aprovechan de la febril búsqueda de alternativas a los combustibles fósiles y del creciente miedo ante la clausura de las fuentes petrolíferas.

El presidente de EEUU ha prometido el pasado diciembre un gran salto en la producción de biocombustibles de aquí a 2020. Eso empuja a tal punto al alza la demanda y los precios del grano, que los pobres van a quedar literalmente fuera de los mercados de alimentos. Con independencia de eso, se sigue promoviendo a los biocombustibles tanto como fuentes energéticas renovables, cuanto como medios capaces de disminuir las emisiones de gases de efecto invernadero, a pesar de que el uso de cosechas enteras de soja, maíz o palma aceitera para producir combustibles líquidos no hacen sino agudizar el caos climático y la emisión de dióxido de carbono.

 

¿Por qué? Sólo la roturación de bosque y selva con objeto ganar tierras para la plantación de soja y palma aceitera trae consigo, sin la menor duda, un incremento de emisiones. La organización de la ONU especializada en agricultura, la FAO, estima que entre el 25 y el 30 por ciento de los gases de efecto invernadero que van a para cada año a la atmósfera procede de la creciente aniquilación de zonas selváticas. La producción de biocombustibles podría, pues, de aquí al año 2022 –eso se teme—, tener como cargo de conciencia el 98% de las selvas pluviosas indonesias.

 

Maíz por etanol

Las cuentas también valen para los EEUU, si en lo venidero, y conforme a las previsiones del gobierno, se dedica el 20% de la cosecha de maíz a la producción de etanol. Con la cantidad de combustible así producido, sólo puede substituirse el uno por ciento del consumo anual de petróleo. Si se usara toda la cosecha de maíz para la producción de etanol, podría substituirse un escaso 5% del actual consumo de petróleo. ¿Quién puede sostener seriamente que aquí se perfila una alternativa para enfrentarse a la tan temida clausura de las fuentes del petróleo? ¿Puede esto realmente ser un medio para frenar el cambio climático? ¿Una vía para explorar fuentes energéticas alternativas?

Quien se decida por esas soluciones, no hará sino agudizar la crisis climática en un sentido catastrófico. No hará, sobre todo, sino agravar las condiciones de injusticia, de hambre y de pobreza que imperan en el mundo.

 

Vandana Shiva cientista,  directora de la Fundación de Investigación por la Ciencia, la Tecnología y la Ecología en Nueva Delhi. India. En 1993 obtuvo el Premio Nóbel alternativo.

Jornada de lutas mobiliza 15 estados e DF por Reforma Agrária e investimento nos assentamentos

Os 600 trabalhadores do MST, famílias e mutilados no Massacre de Eldorado dos Carajás ocuparam a sede da mineradora Vale para denunciar a campanha da empresa contra os movimentos sociais e em solidariedade aos integrantes do Movimento dos Trabalhadores e Garimpeiros na Mineração (MTM), que fizeram protesto em Parauapebas na manhã desta quinta-feira (17/4).

As famílias vítimas fizeram um protesto simbólico, com uma ocupação de uma hora (entre 15h e 16h), depois saíram do prédio e participaram de ato em memória aos 19 trabalhadores mortos no Massacre de Eldorado dos Carajás, que completa 12 anos de impunidade hoje. Nada foi quebrado da manifestação.
 
“A nossa ocupação simbólica foi um ato em protesto contra as declarações criminosas da diretoria da Vale. Bandidos são os diretores da Vale, que não têm apreço pela democracia, prejudica comunidades e desrespeita os movimentos sociais e o povo brasileiro. . Vamos seguir a luta pela sua reestatização para resolver essas problemas e resgatar um patrimônio da Nação”, disse o integrante da coordenação nacional do MST, Ulisses Manaças. 
 
Os trabalhadores que fizeram ocupação estavam acampados em frente ao Palácio dos Despachos no Pará, sede do governo do estado, desde segunda-feira, para cobrar da governadora Ana Júlia Carepa (PT) o cumprimento de suas promessas de 2007. Leia depois do balanço nota do MST sobre manifestação do MTM em Parauapebas.

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Balanço nacional

 

Nesta quinta-feira (17/04), dia em que o episódio conhecido como Massacre de Eldorado dos Carajás completa 12 anos sem que nenhum responsável tenha sido preso, o MST realizou protestos em 15 estados e no Distrito Federal na jornada nacional de lutas por Reforma Agrária, para exigir o assentamento das 150 mil famílias acampadas no país, investimentos públicos na produção agrícola e habitação em assentamentos.

 

As famílias Sem Terra exigem também mudanças na política econômica para criar condições para a sustentabilidade de um modelo agrícola baseado em pequenas e médias propriedades. Foram realizados protestos em Pará, Pernambuco, Sergipe, Paraíba, Ceará, Roraima, Maranhão, Pará, Piauí, Rio Grande do Sul, Distrito Federal, Santa Catarina, Paraná, São Paulo e Rio de Janeiro e Mato Grosso. 

 

"A Reforma Agrária está emperrada no país por causa da política econômica, que beneficia as empresas do agronegócio, concentra terras e verbas públicas para a produção de monocultura para exportação. O governo precisa apoiar a pequena e média produção agrícola para fortalecer o mercado interno, garantir a produção de alimentos para a população e a preservação do meio ambiente", afirma José Batista de Oliveira, da coordenação nacional do MST.

No Paraná, para denunciar os 12 anos de impunidade do Massacre de Eldorado dos Carajás e cobrar agilidade no processo de Reforma Agrária, milhares de trabalhadores do MST (Movimento dos Sem Terra), realizam hoje (17/04), mobilizações em várias praças de pedágios do Paraná.

 

O MST também protesta contra a violências das milícias armadas no Paraná, as privatizações das rodovias federais e estaduais e as tarifas abusivas. Foram ocupadas as praças de Paranaguá, São Miguel do Iguaçu, Marialva, Campo Mourão e São Luiz do Purunã. Atualmente, os pedágios são um dos principais entraves da agricultura camponesa e familiar, pois encarece o transporte e distribuição dos produtos agrícolas, prejudicando os produtores no campo e os consumidores.

 

Em São Paulo, duas agências do Banco do Brasil foram ocupadas, nos municípios de Sorocaba e Andradina. Entre as reivindicações estão a criação de um novo crédito para a Reforma Agrária. A nova linha de crédito seria para, entre outras coisas, criar as condições de produção de auto-consumo e de infra-estrutura nos primeiros anos dos assentamentos. Cerca de 400 trabalhadores rurais ocuparam a fazenda Saltinho no município de Americana, região de Campinas. A área de 216 hectares faz parte de um complexo de terras de 8,5 mil hectares utilizados indevidamente pela Usina Ester para o plantio de cana-de-açúcar.

 

Em Pernambuco, cerca de 3.000 trabalhadores rurais marcharam pela capital Recife, desde a sede do Instituto Nacional de Colonização e Reforma Agrária (Incra), onde 700 Sem Terra já estavam acampados desde ontem (16), até o Palácio das Princesas, onde foi entregue uma pauta de reivindicações ao governador do estado. Além do assentamento das 14.000 famílias acampadas no estado, os Sem Terra reivindicam investimento publico nas áreas de assentamento, principalmente em relação à habitação, infra-estrutura, créditos de fomento à produção agrícola e assistência técnica.

No Rio Grande do Sul, quatro rodovias foram bloqueadas no estado por 19 minutos. Os bloqueios ocorreram na BR-356 em Nova Santa Rita e nas rodovias estaduais de Tupanciretã, Bossoroca e Nonoai.  Em Coqueiros do Sul, no Norte do estado, cerca de 200 acampados entraram na Fazenda Guerra, onde colocaram cruzes de madeira e faixas lembrando os companheiros mortos no Pará. As famílias já saíram do local. Em São Gabriel, os 800 integrantes do MST seguem na ocupação da Fazenda Southal, exigindo a desapropriação da área, que possui uma dívida de R$ 50 milhões com o governo federal, para a reforma agrária.

 

Em Santa Catarina, 500 trabalhadores rurais chegaram pela manhã a Chapecó, onde ocuparam a sede do Incra para reivindicar o assentamento das 700 famílias acampadas no estado, além da construção de 1050 casas em assentamentos. De lá, realizaram uma marcha até a Praça Central da cidade para lembrar o Massacre de Eldorado dos Carajás.

 

Na Paraíba, foram ocupadas 6 fazendas em todo o estado, além do fechamento da rodovia que liga Catingueira ao Piancó, na região do sertão. 70 famílias ocuparam uma área próxima ao município de São Mamede; cerca de 100 famílias ocuparam fazenda a 3km do município de Imaculada; 70 familias ocuparam fazenda próxima ao município de Santa Terezinha e 60 familias ocuparam fazenda próxima ao município da Santana dos Garrotes. Além disso, 60 familias ocuparam a Fazenda Serra Preta, a 2 km do município de Algodão de Jandaira.

 

Em Sergipe, cerca de 850 famílias ocuparam a usina hidrelétrica de Xingo, no município de Canindé de São Francisco. "Exigimos o reinício das obras do canal de irrigação do projeto Jacaré Curituba, que há 10 anos amarga o descaso da empreiteira", disse o integrante da coordenação nacional do MST, João Daniel. A usina pertencente ao grupo Chesf (Companhia Hidro Elétrica do São Francisco) e é gerenciada pelo grupo Codevasf (Companhia de Desenvolvimento
do São Francisco), que há um ano reatem os 51 milhões para a finalização da obra.

 

No Rio de Janeiro, diversos movimentos e entidades entregaram uma carta aberta ao Incra no Rio, pedindo medidas do governo contra a impunidade do Massacre de Eldorado dos Carajás e a agilidade no processo de reforma Agrária. A Carta foi entregue ao Superintendente Mario Lúcio, por representantes da CMP, Justiça Global, MST, Deputado Estadual Marcelo Freixo, PACS, entre outros.

 

No Distrito Federal, cerca de 400 trabalhadores ocuparam a Superintendência Regional do Incra DF para reivindicar o assentamento das 1.200 famílias acampadas e a construção imediata de 300 casas nos assentamentos da região, além de crédito para recuperação de casas e assistência técnica. Os Sem Terra estão reunidos com o presidente da autarquia, Rolf Hackbart.  

 

No Maranhão, cerca de 300 Sem Terra ocuparam a sede do Incra em Imperatriz. Os trabalhadores reivindicam o assentamentos das 2,8 mil famílias acampadas no estado, e cobram crédito para infra-estrutura nos asssentamentos.

 

No Piauí, cerca de 300 pessoas ocuparam a sede da Caixa Econômica Federal de Teresina. No início da tarde, saíram do prédio e marcharam até a sede do Incra, onde permanecem mobilizados.  

 

No Ceará, foram bloqueadas a BR-116, a 160 km de Fortaleza, com 400 pessoas, e a BR-020, no município de Boa Viagem, com 500 pessoas. Em Canindé, acontece marcha com 700 pessoas em direção a praça Tomás Barbosa, no centro da cidade, onde acontecerá audiência pública no Incra.

 

Em Roraima, cerca de 200 trabalhadores rurais Sem Terra ocuparam uma área da União no município de Bomfim, a 60 km de Boa Vista. Outros 200 Sem Terra ocuparam a sede do Incra em Boa Vista.

 

No Mato Grosso, cerca de 300 integrantes do MST bloquearam hoje a BR-070, que liga o país à Bolívia, na região oeste do Estado. Os manifestantes permitiram apenas a passagem de ambulâncias pela barreira.

 

Em Minas Gerais, mais de 500 trabalhadores e trabalhadoras sem terra ocupou a fazenda Correntes, no município de Jequitaí, Região Norte de Minas, que é improdutiva.

 

No final, leia nota do MST sobre o protesto do MTM, que aconteceu hoje pela manhã em Parauapebas.
 
NOTA
MANIFESTAÇÃO CONTRA A VALE NO PARÁ
 
1- O MST esclarece que a obstrução dos trilhos da Estrada de Ferro Carajás, em Parauapebas (PA), na manhã desta quinta-feira (17/4), foi realizada pelo MTM (Movimento dos Trabalhadores na Mineração), que faz uma série de protestos para denunciar a exploração da empresa mineradora Vale e exigir a retomada de parte da área

2- Um funcionário da mineradora admitiu que a Vale orientou seus maquinistas a não parar o trem e passar por cima dos manifestantes. A irresponsabilidade da Vale deixou 22 trabalhadoras e trabalhadores feridos quando a sua locomotiva passou por cima de troncos de árvores no local do protesto de hoje.

3- Cerca de 500 soldados da Polícia Militar do Pará ameaçam invadir o acampamento do MTM. Helicópteros sobrevoam a área e assustam as famílias, deixando a situação tensa. Esperamos que o governo do estado cumpra o seu papel de garantir a integridade dos manifestantes.

4- A Vale supostamente defende o Estado democrático de Direito, no entanto, faz apologia à violência contra os trabalhadores, que têm o seu direito de manifestação garantido na Constituição de 1988 e faz parte da dinâmica do jogo democrático. A Vale alega também que não tem responsabilidade diante da questão agrária, mas concentra terras, renda e explora recursos naturais de maneira predatória para o meio ambiente. 

5- A diretoria da Vale demonstra intolerância e truculência contra os trabalhadores sem-terra, em particular, e contra o povo brasileiro, em geral, com suas declarações que legitimam a violência e atacam a democracia. A Vale vem criminalizando os movimentos populares ao criar um clima de terror, incentivando a violência contra famílias sem-terra, que classifica de “bandidos” por fazerem a luta por melhores condições de vida. A Vale usa os meios de comunicação empresariais e as agências de publicidade para confundir a opinião pública e pressionar os governos para que reprimam os protestos populares.
 
6- O MST apóia as manifestações que denunciam a responsabilidade da Vale por suas ações criminosas e danos sociais, impostos às comunidades que vivem em torno das suas instalações, aos garimpeiros e seus trabalhadores. A Vale comete crimes ambientais e sociais, sendo a empresa campeã em multas do Ibama (Instituto Brasileiro do Meio Ambiente e dos Recursos Naturais Renováveis).
 
7- Um conjunto de organizações populares, sindicatos, estudantes, intelectuais, pastorais sociais e partidos políticos questionam na Justiça a venda desse patrimônio do povo brasileiro, no governo Fernando Henrique Cardoso, que consideramos uma traição à Nação. Em 2007, mais de 40 organizações promoveram um plebiscito popular sobre a retomada da Vale por conta das irregularidades da privatização. O resultado demonstra que 3,7 milhões de brasileiros defendem que a mineradora volte a ser uma empresa pública.

8- O MST vai continuar a luta contra o latifúndio, a monocultura para exportação e as empresas transnacionais, que não representam uma solução para os pobres, e contra as empresas que ferem a soberania nacional. A sociedade precisa criar condições para o atendimento das necessidades sociais, econômicas e políticas da maioria da população, o que não vai acontecer pela eliminação dos pobres do campo nem com o êxito de uma empresa privada que só está preocupada com o futuro do país nos comerciais de TV.
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15 de Abril de 2008

Biocombustíveis, safras geneticamente modificadas, uso de tecnologia tradicional, impacto na mudança climática… Em tempos de alta recorde de preços dos produtos agrícolas, um relatório apresentado hoje, 15 de abril, na UNESCO relata a necessidade crescente de mudar as regras da agricultura moderna ONU diz que práticas agrícolas precisam mudar.

Um relatório encomendado por uma agência da ONU (Organização das Nações Unidas) publicado nesta terça-feira afirma que é preciso mudar as regras e práticas agrícolas atuais para combater a alta do preço dos alimentos. «Negócios como antigamente não são mais uma opção», diz o relatório. «O aumento do custo de produção dos alimentos pode colocar milhões de pessoas abaixo da linha da pobreza.» O estudo, publicado pela Unesco em Paris, pede mais ênfase para a proteção de recursos naturais.  O documento defende o uso de técnicas de agricultura mais naturais e ecológicas, inclusive com a redução da distância entre a produção e os consumidores.

Proibição a transgênicos

Para a América Latina e o Caribe, o relatório se centrou no combate à pobreza e na questão dos transgênicos. O documento afirma que o aumento da produção agrícola na região não gerou redução na pobreza, que ainda afeta 37% dos latino-americanos e caribenhos.  Em vez disso, diz o estudo, «a importação de alimentos criou dependência e trouxe prejuízos à produção local». Os autores recomendam que os governos proíbam o consumo e o plantio de colheitas transgênicas –como algodão, soja, milho e canola– para evitar a contaminação e preservar a diversidade genética. «A critério de cada país, o marco regulatório pode incluir a possibilidade de impedir o uso (de transgênicos) nos centros de origem e diversidade genética», diz o documento.

«Em regiões ou países que optem por produzir transgênicos, a regulação deveria se basear no princípio da precaução e no direito dos consumidores de ter uma escolha informada, por exemplo, por meio de etiquetas», acrescenta o relatório.  «As conseqüências das tecnologias emergentes sobre as metas de sustentabilidade ainda são muito debatidas», avaliam os autores. «A possibilidade de contaminação genética de algumas espécies está demonstrada e deve ser parte indispensável das políticas de biossegurança, que, ao mesmo tempo, devem evitar a contaminação de outros sistemas produtivos livres de transgênicos.»

Custos

O texto é resultado de três anos de trabalho conjunto de cientistas e outros especialistas, além de governos de países desenvolvidos e em desenvolvimento. O relatório da Unesco conclui que o progresso na agricultura trouxe benefícios muito desiguais, com altos custos sociais e ambientais.  A Unesco cita também a «influência considerável» de grandes corporações transnacionais na América do Norte e na Europa. O texto diz que é preciso agir para conter a crise, que deve continuar se agravando com o aumento da demanda por alimentos em países como China e Índia e com o uso de milho e soja para produção de combustíveis. O informe contou com a participação de mais de 400 cientistas internacionais, governos, membros da sociedade civile indústria.

English:

Modern agricultural practices must change, concludes report to be presented at UNESCO At a time of record high prices for agricultural products, the International Assessment of Agricultural Science and Technology for Development (IAASTD)* will release its report on the state of global agriculture on 15 April at UNESCO. The report considers such major issues as biofuels, GM crops, use of traditional know-how, impact of climate change, and underlines the pressing need to change the rules of modern agriculture.

Two of the report’s authors, Fabrice Dreyfus (SUPAGRO, Montpellier) and Marianne Lefort (Institut des sciences et industries du vivant et de l’environnement, Paris), will be present at the launch. Salvatore Arico, from UNESCO’s Division of Ecological and Herat Sciences, and Guilhem Calvo, a UNESCO consultant, will also attend.  «Business as usual is no longer an option,» the report stresses. The first conclusion: while agricultural science and technology has made it possible to greatly increase productivity in the last 50 years, the sharing of benefits has been far from equitable.
Furthermore, progress has been achieved in many cases at a high social and environmental cost. The report’s authors therefore recommend that agricultural science place greater emphasis on safeguarding natural resources and on «agroecological» practices. These include using natural fertilizers and traditional seeds, intensifying natural processes and reducing the distance between agricultural production and the consumer.

The need for action is urgent. Since March 2007, soybean and wheat prices have increased by 87% and 130% respectively, and global grain stores are today at their lowest level on record. Prices of staple foods such as rice, maize and wheat are expected to continue to rise because of increased demand, especially in China and India, and because of the alternative use of maize and soybeans for bio-fuels. Furthermore, states the report, «35% of the Earth’s severely degraded land has been damaged by agricultural activities.»

In North America and Europe, the amount of agricultural research funded by the private sector has greatly increased, and this has largely determined the direction of the research conducted. Big transnational corporations thus wield considerable influence on agricultural science and its priorities.

Central and West Asia and North Africa retain a unique agricultural biodiversity, but this is starting to disappear. The region is particularly at risk from climate change and is likely in the coming years to suffer the negative consequences of limited water resources. Already nearly half of its renewable water resources are below the minimum level necessary for development.

In East and South Asia and the Pacific, the current agricultural development path is leading to increased pollution, notably from nitrogen. Climate change is sure to produce large-scale migratory movements. Between now and 2020, the amount of water available per person will decrease to approximately a third of what it was in 1950 or even less.

In Latin America and the Caribbean, increased yield from agricultural production has not led to a significant decrease in poverty, which still affects 37% of the population. Importing food has created dependence and disrupted local production. The authors recommend that governments prohibit the consumption and growing of genetically modified organisms in countries that are centres of origin of such crops, in order to prevent contamination and to preserve genetic diversity.

In Sub-Saharan Africa, agriculture accounts for an average of 32% of the region’s GDP. Water scarcity, however, affects nearly 80% of agricultural land. Loss of genetic diversity represents a problem because a number of species and grains that represent a very small part of global exchange are local food staples.

The report is the result of three years of cooperation between nearly 400 scientists, the governments of developed and developing countries, and representatives of civil society and the private sector. Its conclusions will be presented for approval to the plenary session of the IAASTD intergovernmental panel that will gather from 7 to 12 April in Johannesburg (South Africa).

The report will be launched simultaneously in several cities including Washington D.C., London and Nairobi.

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(*) Launched in 2002 by the World Bank and the United Nations Food and Agricultura Organization (FAO) at the at the World Summit on Sustainable Development (WSSD) in Johannesburg, the International Assessment of Agricultural Science and Technology for Development (IAASTD), is concerned with modern science and technology but also with local and traditional know-how and with productivity and the impact of agricultural activities on the environment. The initiative is sponsored by five UN agencies including UNESCO

12 de abril de 2008

Os trabalhadores rurais do MST fizeram protestos e ocupações de terras em cinco estados para denunciar a ineficiência do programa de Reforma Agrária e cobrar investimentos públicos em assentamentos do governo federal, desde o começo do mês.

O MST exige o assentamento das 150 mil famílias acampadas, a criação de uma linha de crédito efetiva para produção de assentados e o atendimento da demanda de construção de mais de 100 mil unidades de habitações rurais. Os protestos são realizados em memória do Massacre de Eldorado de Carajás em 1996.

 

"A Reforma Agrária está emperrada no país por causa da política econômica, que beneficia as empresas do agronegócio, concentra terras e verbas públicas para a produção de monocultura para exportação. O governo precisa apoiar a pequena e média produção agrícola para fortalecer o mercado interno, garantir a produção de alimentos para a população e a preservação do meio ambiente", afirma José Batista de Oliveira, da coordenação nacional do MST.

 

Os Sem Terra de Pernambuco ocuparam três áreas na manhã deste sábado (12/4). Há mais de 13 mil famílias acampadas no estado, vivendo debaixo de lona preta em 132 acampamentos.

 

No Agreste Meridional, cerca de 100 famílias ocuparam a Fazenda Ipanema, no município de Pesqueira. A área de 1.200 hectares está abandonada e improdutiva. O MST exige que a fazenda seja vistoriada pelo Instituto Nacional de Colonização e Reforma (Incra) para que seja desapropriada para fins de Reforma Agrária, conforme determina a lei.

 

No município de Moreno, região metropolitana do Recife, 60 famílias ocuparam pela terceira vez o Engenho Xixaim. O Engenho é uma área de conflito e, em abril do ano passado, foi ocupado por 100 famílias que denunciavam o descumprimento de determinação ambiental que prevê uma distância mínima entre a margem do rio Duas Unas e as plantações de cana-de-açúcar, por causa das queimadas. Em 2005, o engenho foi autuado pelo Instituto Brasileiro do Meio Ambiente e dos Recursos Naturais Renováveis (Ibama) pelas irregularidades

 

Cerca de 800 famílias Sem Terra ocuparam a Fazenda Baixa Grande, no município de São José do Belmonte, Sertão do Estado. A área tem 9.000 hectares, está improdutiva e abandonada há mais de cinco anos. O latifundiário Romero Aires Montenegro recebeu financiamento do antigo Finor (Fundo de Investimento para o Nordeste) para projeto de produção de caju e depois faliu. O MST exige que a fazenda seja vistoriada pelo Instituto Nacional de Colonização e Reforma (Incra).

 

No interior de São Paulo, na região de Bauru (a 325 quilômetros da capital), 600 famílias ocupam o latifúndio Águas do Pilintra, no município de Agudos, de 5,4 mil hectares, desde sábado. A área utilizada pela Ambev (Companhia de Bebidas das Américas) para o plantio de eucalipto e cana-de-açúcar está no centro de uma região com 10 mil hectares de terras reconhecidas oficialmente como devolutas. Além disso, 15 mil hectares de terras são improdutivos no município. As famílias reivindicam que as áreas se transformem em assentamentos. Atualmente, 1600 famílias estão acampadas no estado.

 

Em Roraima, 500 trabalhadores rurais do MST ocuparam na manhã de sexta-feira um fazenda do governo federal de 4.000 mil hectares na região do Bom Entento, localizada a 28 quilômetros de Boa Vista. Os trabalhadores já montaram barracas e pretendem ficar até que as reivindicações sejam atendidas pelos governos.

 

A escolha do local foi motivada pela proximidade com a capital e pelas condições de beneficiamento da área. “Já estamos fazendo um estudo de viabilidade de produção e na próxima semana vamos começar a plantação de macaxeira, tomate, entre outras sementes”, afirmou o integrante da coordenação do MST, Ezequias David.

 

Na Bahia, cerca de 550 famílias do MST ocupam a Fazenda Bela Manhã, do grupo Aracruz Celulose, em Teixeira de Freitas, desde 5 de abril. A famílias, que estavam acampadas em terreno da Ceplac, estão na luta pela terra desde o mês de abril do ano passado, quando ocuparam uma área ligada à Suzano Papel e Celulose.

 

Depois da ocupação da Suzano, o Incra (Instituto Nacional de Colonização e Reforma Agrária) e o Governo do Estado se comprometeram com a aquisição de terras para o assentamento de 1.000 famílias. "O governo está sendo extremamente vagaroso, sem tomar iniciativas para agilizar a desapropriação de terras e insistindo em tratar a reforma agrária como caso de polícia" denuncia Evanildo Costa, da coordenação estadual do MST.

 

A área reivindicada de 2,4 mil hectares de terra é grilada e improdutiva. Do total, apenas 200 hectares são de propriedade legal da Aracruz, sendo a maior parte terras devolutas do Governo do Estado. "A terra deve ser desapropriada pra assentar famílias da região, que vêm sendo sistematicamente excluídas pelo modelo de monocultura pra exportação implementado pelo agronegócio", afirma Evanildo.

 

No Pará, trabalhadores mutilados e as viúvas dos agricultores assassinados no massacre de Eldorado dos Carajás acampa em frente ao Palácio dos Despachos no Pará, sede do governo do estado, desde segunda-feira. Os manifestantes cobram da governadora Ana Júlia Carepa (PT) o cumprimento de suas promessas de 2007.

 

Os protestos são realizados em memória dos 19 companheiros assassinados no Massacre de Eldorado de Carajás, em operação da Polícia Militar, no município de Eldorado dos Carajás, no Pará, em 1996, no dia 17 de Abril. Depois de 12 anos de um massacre de repercussão internacional, o país ainda não resolveu os problemas dos pobres do campo, que continuam sendo alvo da violência dos fazendeiros e da impunidade da justiça.

 

Em homenagem aos mártires de Carajás, a Via Campesina Internacional decretou em todo o mundo o 17 de abril como Dia Internacional de Luta Camponesa. No Brasil, por iniciativa da então senadora Marina Silva (PT), o Congresso Nacional aprovou e o presidente Fernando Henrique Cardoso sancionou um decreto que determina que a data seja o Dia Nacional de Luta pela Reforma Agrária.

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Informações à Imprensa
Cássia Bechara – MST-PE – (81) 96474331 / 8795 4986 / 3722

Camila Bonassa – MST-SP – (11) 8276-6393

Paulo A. Magalhães – MST-BA – (71) 8741-1251

 

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Integrantes do MST ocupam fazenda do Grupo AraCruz

Cerca de 550 famílias do Movimento dos Sem Terra (MST) ocupam os 2,4 mil hectares da Fazenda Bela Manhã, pertencente ao Grupo Aracruz Celulose – próxima ao município de Teixeira de Freitas, – desde a madrugada de anteontem. Eles reivindicam a agilização dos processos de reforma agrária, ação que segundo suas lideranças foi prometida pelos governos estadual e federal.


De acordo com o diretor regional do MST, Uelton Pires, as ocupações fazem parte de uma programação que já dura sete meses. “Na primeira ação do nosso movimento, fizemos um acordo com o Incra (Instituto Nacional de Colonização e Reforma Agrária) para assentar 1,5 mil famílias, mas esse processo não foi finalizado”, conta. Pires diz que o movimento conta atualmente com 800 famílias que precisam de terra para produzir e sobreviver. Ele conta que 250 delas estão instaladas na Escola Agrícola Estadual, em Teixeira de Freitas.

O diretor declara que o restante do grupo se reuniu para a ocupação da Bela Manhã. Ele afirma que a fazenda “é uma terra devoluta, de propriedade do Governo do Estado, explorada pelo Grupo Aracruz Celulose”. E acrescenta: soubemos também que há participação do Grupo Cafenorte LTDA. Indicamos nove fazendas da Aracruz para a desapropriação pelo Incra”.

Pires garante que a ocupação será mantida até que a fazenda seja desapropriada. “Os pais de família que estão aqui precisam desta terra para produzir e não desistirão de obter a sua posse.

Este será o abril vermelho. Faremos várias ocupações no Estado”, declarou. Um exemplo desta determinação é a integrante Ananile Silva, que ressalta as dificuldades causadas pela falta de um meio de subsistência.

“Tenho dez filhos, que precisam de uma terra para aprender a trabalhar”, argumenta. Ananile se queixa das condições de vida de um assentado, o que reforça a ansiedade em resolver a questão. “Debaixo desta lona é muito difícil. Espero ficar aqui.

O movimento é até divertido e nos dá uma expectativa de conseguir algo pelo qual sempre lutamos”, desabafa.

Funcionários da fazenda forneceram um telefone de contato com seus administradores, mas ao longo do dia de anteontem, a reportagem tentou falar com eles, sem sucesso.

O presidente Lula assinou uma Medida Provisória nº 422 que possibilitará aos latifundiários e as transnacionais do agronegócio a se apoderarem de mais terras na Amazônia Legal. O texto da MP foi inspirado pela Bancada Ruralista, sob a liderança do lider do governo no Senado, o senador Romero Jucá. Há alguns anos atrás a regularização estava limitada em imóveis rurais de até 100 hectares, depois foi ampliada para 500 hectares e agora triplicada para 1.500 hectares.

Essa medida abre possibilidade para que o agronegócio avance sobre as glebas dos posseiros e das famílias de agricultores/as e, como detentor do capital financeiro, compre as áreas regularizadas. Esse processo concentrador de terra e poder na Amazônia Legal, vai aumentar o poder dos seus aliados políticos, a Bancada Ruralista. Essa estratégia é parte do um avanço do território do agronegócio sobre o território dos camponeses e dos indígenas, onde se encontra a riqueza dos recursos naturais. A tendência de savanização da Amazônia, apontada pelas pesquisas sobre mudança climática, vai acentuar-se com o desmatamento que virá após a compra das terras pelo agronegócio.

Essa possessão do agronegócio não é expressão do desenvolvimento, nem do crescimento do país, mas uma forma de exterminar a cultura rural camponesa e indígena de resistência diante das previsões contrárias às suas sobrevivências. A tendência de territorialização do agronegócio significa a monopolização do território campones. Assim, não se pode aceitar a expanção do agronegócio como um processo de modernização e de valorização da vida.

O senador Romero Jucá durante a cerimônia de assinatura da MP pelo presidente Lula, declarou que era uma “MP do Congresso”. Essa declaração poderia soar como uma ironia se não fosse apenas uma tirada política e se a competência de edição de MP não fosse exclusiva do presidente da República e o Congresso não estivesse discutindo a redução de edições de MPs, que travam a pauta impedindo as propostas de lei de serem votadas no plenário.

O senador Jucá, como ministro da Previdência Social foi alvo da mídia, que até hoje assombra o senador. A Agência Senado[1] confirmou que o senador do PMDB/RR é investigado nos inquéritos 2221 (apura denúncias feitas quando Jucá era ministro da Previdência Social, em 2005) e 2116 (suspeita de irregularidades em empréstimos feitos pelo Banco da Amazônia para a empresa Frangonorte) que tramitam no Supremo Tribunal Federal, ambos sob segredo de Justiça.

O presidente Lula, na cerimônia de lançamento da MP, lembrou aos parlamentares presentes que “é preciso que o Legislativo vote a reforma tributária” e que "o Congresso precisa levar a cabo a reforma tributária". Em bom politiquez a mensagem é a seguinte: assino a MP do Agronegócio e vocês votam a minha reforma tributária. Isso é o que chamamos nos bastidores da ciência política de apresentar a fatura no momento da compra.

A senadora Serys Slhessarenko (PT-MT) parabenizou o presidente Lula pela assinatura da medida provisória. E afirmou candidamente, assim como o diretor de Ordenamento da Estrutura Fundiária do Incra, Roberto Kiel, que a aprovação da MP do Agronegócio deverá beneficiar 90% dos posseiros da Amazônia. Porém, Kiel, vai além ao afimar que “agora eles poderão comprar do governo federal as terras que já ocupavam há anos e não vão precisar de concorrer com outros interessados”.

Diante dessas expressões de êxtases dos ruralistas, de alguns parlamentares e de técnicos do governo, nos perguntamos o que os ex-posseiros ganharão com a MP. Roberto Kiel, em nota do Ministério do Desenvolvimento Agrário (MDA), responde: “receberá a Certidão de Cadastro de Imóvel Rural e terá sua propriedade incluída no Sistema Nacional de Cadastro Rural. Isso permitirá a realização de transações imobiliárias (como a venda e o desmembramento do imóvel rural) e possibilitará o acesso às políticas públicas (Programa Nacional de Fortalecimento da Agricultura Familiar –Pronaf)”.

Sabe-se que o Pronaf não está passando por seus melhores momentos. Há uma série de pesquisas que demonstram certa inadimplência dos tomadores de empréstimos junto ao programa. A Revista de Economia e Sociologia Rural, traz um relatório da pesquisa de Carlos Guanziroli^[2], que afirma que “o atraso é maior quando o risco é do Tesouro chegando a 48% no caso do PRONAF/C. O grupo A/C também registrou alto índice de atraso. Dados do Ministério de Integração Regional referido aos Fundos Constitucionais da região Norte mostram índices de inadimplência bastante altos 2004: PROCERA: 42,6%, PRONAF/A: 3,4%, PRONAF/C: 8,1%, PRONAF/D: 4,2%”. Acrescenta, o estudo, que os dados de inadimplência não são muito altos porque parte dessas dívidas foi renegociada obtendo-se novos prazos de vencimento o que oculta o verdadeiro atraso dos créditos.

Assim, nas entrelinhas da declaração do diretor de Ordenamento da Estrutura Fundiária do Incra, pode-se inferir a possibilidade de compra das terras pelo agronegócio e de como uma política de crédito rural, como o Pronaf, pode não ser a melhor oferta do Estado fazer aos agricultores/as familiares. Assim, o êxtase de que 90% dos posseiros da Amazônia poderão ser beneficiados começa a soar mais como uma ameaça do que uma saída para seus problemas[3].

A Medida Provisória levada ao presidente da República pela Bancada Ruralista para que se amplie a área dos imóveis a serem regularizados na Amazônia Legal de 500 para 1.500 hectares é um cavalo de tróia. No bojo do encantamento da possibilidade dos camponeses de obterem o título de propriedade de suas posses há, em verdade, uma armadilha de apoderamento de suas terras.

Se essa MP é tudo o que pensamos que seja, é importante que os movimentos sociais do campo saibam, de fato, o que vão enfrentar. Que comecem a se mobilizar contra essa medida patológica, que amplia o poder político de um grupo organizado de parlamentares no sentido de extinguir os elementos resistentes da cultura rural camponesa e indígena.