HISTORIA

Creado en 1985, el MST actúa hoy en 23 estados, engloba amás de 1.5 millones de personas, con trescientas mil familias asentadasy ochenta mil que viven en acampamentos.

La lucha por la tierra en Brasil surgió antes que el MST. Canudos y Contestado, al final del siglo XIX, las Ligas Campesinas y Master (Movimiento dos Agricultores Sin Tierra) entre 1950 y 1964 fueron algunas de las experiencias anteriores al MST, en que trabajadores rurales se organizaron en busca de tierra y mejores condiciones de trabajo y vida.

La historia del MST comienza al final de la década de 1970, el país vivía el llamado "milagro brasilero" que acabó en una crisis que generó gran desempleo en las ciudades. En el campo la situación no era diferente. Como resultado de la intensa mecanización de la agricultura introducida por los gobiernos militares, asalariados del campo, arrendatarios y aparceros fueron excluidos de los latifundios.

En plena dictadura militar, agricultores sin tierra en el estado de Río Grande do Sul ocupan, el 7 de septiembre de 1979 la finca Macali, en Ronda Alta. Esa primera acción promovida por la CPT (Comisión Pastoral de la Tierra) surgió en respuesta a la pasividad del gobierno frente a otras formas de lucha utilizadas por los sin tierra.

La represión contra los Sin Tierra

Luchas semejantes fueron sucediendo paralelamente en los demás estados del sur, en Mato Grosso y en São Paulo. Estos actos se ganaron el apoyo de la sociedad brasilera y empujaron en todo el país manifestaciones por la democracia.

En cada estado surgían ocupaciones de trabajadores rurales y la noticia se iba expandiendo, caminando rumbo a la construcción de una entidad de alcance nacional para luchar por la Reforma Agraria.

En 1984, en el 1er encuentro de los trabajadores rurales sin tierra, realizado en Cascavel, (Paraná), es fundado oficialmente el MST. En el año siguiente, mientras se iba articulando en otras regiones brasileñas, se celebra el 1er Congreso Nacional de los Sin Tierra.

La historia mostró a los Sin Tierra que sin la lucha no hay conquistas. Y así fueron organizados acampamentos; cupaciones de tierras, sedes de organismos públicos y de multinacionales; destrucción de plantaciones de transgénicos; marchas; huelgas de hambre y otras acciones.

La Marcha Nacional por el Empleo, la Justicia y la Reforma Agraria es uno de los eventos recientes más importantes. Las marchas partieron de diversos puntos del país y caminaron mil quinientos kilómetros hasta llegar a Brasilia el 19 de abril de 1997. Un año después de la masacre de Eldorado dos Carajás, más de cien mil personas estuvieron en la explanada de los Ministerios.

Otro hecho importante de la historia reciente del MST fue el cuarto Congreso Nacional, realizado en agosto de 2000, que, a pesar de las enormes dificultades enfrentadas, como el poco interés mostrado por el gobierno en la realización de la reforma agraria, contó con la participación de 11 mil congresistas.

IV Congreso Nacional del MST

 

A lo largo de estos 17 años, el MST comprendió que la conquista de la tierra no era suficiente. Crédito, vivienda, asistencia técnica, escuelas, centros de salud y otras necesidades de las familias sin tierra también deberían ser proporcionadas. Es por eso que las familias siguen luchando, aunque ya estén asentadas.

Como resultado de estas luchas y de la organización de los trabajadores rurales, existen hoy cerca de 400 asociaciones de producción, comercialización y servicios, 49 Cooperativas de Producción Agropecuaria (CPA), con 2299 asociadas, 32 Cooperativas Regionales de Comercialización y tres Cooperativas de crédito con 6521 asociados. Son 96 pequeñas y medias industrias agrícolas que procesan frutas, hortalizas, leche y derivados, granos, café, carnes y dulces, que generan empleo, renta e impuestos beneficiando indirectamente a cerca de 700 pequeños municipios del interior del país.

Unida a la producción está la educación: cerca de 160 mil niñas y niños estudian de la 1ª a la 4ª serie en las 1800 escuelas públicas de los asentamientos. Son cerca de 3900 educadoras y educadores pagados por los municipios y desarrollando una pedagogía específica para las escuelas del campo. En conjunto con la UNESCO y más de 50 universidades, el MST desarrolla un programa de alfabetización de aproximadamente 30 mil jóvenes y adultos en los asentamientos. Están en marcha, en siete universidades, cursos de Pedagogía y Magisterio para formar nuevas educadoras y educadores.

Hay también formación de técnicos en administración de asentamientos, cooperativas y en magisterio para colaborar con el trabajo desarrollado en los asentamientos a través de la Escuela Técnica Josué de Castro, en Veranópolis. En 2001 se inició también un curso técnico en Enfermería. Y con el apoyo del Ministerio de Medio Ambiente se desarrolla un Programa de Educación Ambiental para líderes, profesores y técnicos de áreas de asentamientos. Junto al fotógrafo Sebastião Salgado se está construyendo una escuela técnica ambientalista en el municipio de Aimores (Matto Grosso)

Conscientes de las necesidades de preservar el medio ambiente y al ser humano, las familias Sin Tierra utilizaron en septiembre de 1999 las semillas Bionatur, producidas sin la utilización de ningún tipo de agrotóxico o insumo químico. Hay aun diversas experiencias de preservación de matorral, como en el Pontal do Paranapanema (Sao Paulo), y la producción de hierbas medicinales.

En 2001, la lucha del MST estuvo marcada por el carácter internacionalista y de unidad con los movimientos del campo que componen Vía Campesina en Brasil (MPA, ANMTR, CPT, MAB, PJR, FEAB y SINPAF). Estos movimientos participaron, juntamente con el MST, en acciones contra los cultivos transgénicos, como la que tuvo lugar en Não-Me-Toque, en Rio Grande do Sul, durante el Foro Social Mundial en enero, en la que los Sin Tierra destruyeron una plantación de maíz transgénico de la Monsanto y ocuparon la fábrica de esta multinacional en Camaçari (Bahía) durante la jornada contra el acuerdo existente entre dicha empresa y la Embrapa (Empresa Brasilera de Pesquisas Agropecuarias)

Vía Campesina convocó manifestaciones en los cinco continentes el día Internacional de Lucha Campesina, el 17 de abril. En la lista de reivindicaciones de los movimientos campesinos del mundo constaba el fin de la intervención de la OMC (Organización Mundial del Comercio) en la agricultura y un no a los transgénicos.

En 2002, la lucha del MST continua buscando caminar junto a los movimientos del campo y de la ciudad, para construir un Proyecto Popular para Brasil.