La política agraria del Banco Mundial en el inicio del siglo XXI:ofensiva neoliberal en marcha acelerada. Está en curso una ofensivapolítica del Banco Mundial (BM) en el sector agrario, especialmentelatino-americano.
Entre el 1990 y el 2004, el BM suscribió con 32 países, 45 préstamospara proyectos relacionados con su política agraria. Sumados losproyectos concluidos y en curso, se observa que las regiones de AméricaLatina y el Caribe responden por un 33,3% del total; el Este Europeo yAsia Central, por un 26,6%; el este de Asia y la región del Pacífico,por un 24,4%; África y Oriente Medio, por un 13,4% y el sur de Asia porun 2,2%. Se nota también, que el BM viene acelerando significativamentela aprobación de tales proyectos: entre 1990 y 1994, 3; de 1995 la1999, 19, totalizando US$ 700 millones; desde el 2000 hasta el 2004,25, totalizando US$ 1000 millones en préstamos. Paralelamente, el BMviene articulando, en diversos países, cursos y talleres para laburocracia estatal
directamente responsable de la implementación de políticas en el mediorural, a fin de ejercer una efectiva dirección intelectual y moralsobre la definición de la política agraria de los Estados nacionales.
Por haber concentrado su agenda en el ajuste macroeconómico, el BMprácticamente abandonó el tema agrario en los años 1980. ¿Por qué,entonces, el BM volvió a interesarse por él en la década siguiente?Básicamente, por cinco razones: a) la oportunidad de despolitizar eltratamiento del problema agrario existente en gran parte de los paísesdel Sur, una vez que el fin de la Guerra Fría, en su visión, habríadebilitado la vinculación entre la lucha por la reforma agraria y unideario de transformación social más amplia; b) la necesidad deliberalizar los mercados agrarios, eliminando las barreras legales a lalibre compra y venta y al arrendamiento de tierras, como parte de losprogramas de ajuste estructural; c) la necesidad de dar respuesta a losconflictos agrarios y, en algunos casos, a las acciones de movimientossociales pro-reforma agraria, con el objetivo de garantizar laseguridad del capital; d) la necesidad de crear programa s socialescompensatorios en el campo en respuesta
a los efectos socialmente regresivos de las políticas de ajusteestructural; y) la necesidad de hegemonizar la mercantilización de lastierras rurales en las sociedades del antiguo bloque soviético, de modode acelerar y consolidar su transición al capitalismo financiero.
El lector ya debe haber percibido que, en hipótesis alguna, se debetratar la política agraria contemporánea del BM como un tema meramente"rural", desligado de procesos económicos y políticos más amplios. Enverdad, tal política agraria fue diseñada y viene operando en losmarcos establecidos por el ajuste estructural impulsado por el FondoMonetario Internacional (FMI) y el BM. Es por eso que esta políticaestá subordinada a dos procesos antagónicos a los intereses del mundodel trabajo: de un lado, la liberalización de las economías nacionales,que profundiza la mercantilización de la vida social; de otro, a lacontra-reforma del Estado, que sustituye su papel redistributivo porpolíticas focalizadas de "alivio" de la pobreza que no alteran lasbases de la reproducción de la desigualdad y de la explotación.
¿Como se organiza la política agraria del BM? Básicamente, en ocho líneas de acción:
– Estímulo a las relaciones de arrendamiento. Este es un tópicoprioritario para el BM, después que la reforma agraria de mercado entróa varios países donde fue experimentada. Implica la suspensión debarreras legales, normalmente creadas en el auge de lasa reformasagrarias, para proteger a los pequeños arrendatarios. El hecho de queeste tipo de relación social fuera identificado, hace décadas, comosinónimos de explotación del campesinado y de retroceso económico portodas las organizaciones campesinas latinoamericanas – no siendoreivindicado por ninguna de ellas – no es tomado en consideración porel BM. Sus objetivos principales son aumentar el uso productivo de latierra y disminuir los costes de producción de las empresasagroindustriales. Diversas investigaciones muestran que ese tipo derelación no está contribuyendo a mejorar el acceso a la tierra enAmérica Latina.
– Estímulo de las relaciones de compra y venta. El objetivo también esaumentar el grado de mercantilización de la tierra, permitiendo, víamercado, la salida de productores "ineficientes" y la entrada deproductores "eficientes", bajo la óptica del capital agroindustrial.
– Titulación privada. Implica la concesión de títulos de propiedad alos poseedores, con el objetivo prioritario de disminuir lainformalidad en el mercado de tierras, dando más seguridad legal a lastransacciones. Para el BM, no importa si un pueblo considera que elvalor de uso de la tierra es más importante que su valor de cambio,pues su visión de desarrollo está basada en la universalización de lapropiedad privada en todas las sociedades humanas. En algunassituaciones, la titulación estimuló la venta de tierras por loscampesinos y su posterior concentración. Además de eso, al contrario delo que afirma el BM, varias investigaciones muestran que el título depropiedad no mejoró el acceso del campesinado pobre al mercado decrédito en América Latina.
– Cambio de la legislación agraria y creación de un nuevo aparatoadministrativo. Se trata de crear las condiciones legales yadministrativas para la libre transacción mercantil de la tierra,simplificando y abaratando los procedimientos burocráticos ygarantizando la seguridad de los contratos. En esa lógica, todo elproceso debería ser gestionado por los municipios.
– Control de los conflictos agrarios. Se trata de la creación demecanismos de resolución o encaminamiento rápido de las tensionessociales, preferentemente por los gobiernos municipales.
– Tributación de la propiedad rural. El BM defiende la municipalizaciónde la tributación rural y no prioriza el apoyo a la implementación dela tributación progresiva para cohibir la especulación agraria.
– Privatización de las haciendas estatales en el Este Europeo y en laantigua Unión Soviética. Se trata de crear mercados de tierra ytransformar la matriz de la propiedad en aquellas sociedades endirección al capitalismo.
– Reforma agraria de mercado. Experimentada en Sudáfrica, Colombia y enGuatemala, entró en colapso, quedándose muy por debajo de lasexpectativas de sus ejecutores. En Brasil, programas de esa naturalezafueron iniciados por el gobierno FHC y continuados por el gobiernoLula. Se trata de la concesión de crédito público a los campesinospobres para la compraventa de tierras, con una parte variable desubsidio destinada a inversiones socio-productivos complementarias. Ensuma, consiste en una mera relación de compra y venta entre agentesprivados financiada por el Estado. Este modelo integra la agenda depolíticas selectivas y puntuales de alivio de la pobreza rural,agravada por las políticas neoliberales de ajuste estructural. Alcontrario de lo que dice el BM, éste no es otro modelo de reformaagraria, pero sí su negación, pues reforma agraria consiste en unaacción pública que, en un corto espacio de tiempo, redistribuye acampesinado pobre tierras privadas apropiadas por una
clase de grandes propietarios. Su objetivo es democratizar laestructura agraria, lo que presupone transformar las relaciones depoder económico y político, causantes de la reproducción de laconcentración agraria. Mientras la política redistributiva implica,antes que todo, la desapropiación obligatoria de tierras privadas queno cumplen su función social. Redistribuir tierra y poder, alterandolas relaciones de fuerza en la sociedad en favor del campesinado y delas coaliciones que el apoyan, nada tiene que ver con las transaccionespatrimoniales privadas financiadas por el Estado.
Es esta la política agraria del BM, en rápida expansión, especialmenteen América Latina. No es difícil percibir cuáles son sus implicacionessociales y políticas. (Traducción: ALAI)
João Márcio Mendes Pereira es historiador, cursa un doctorado enHistoria en la Universidad Federal Fluminense/Brasil, Rio deJaneiro/Brasil.
Disponible en
http://alainet.org/active/9257&lang=es
http://www.cadtm.org
www.resistir.info
Texto publicado en portugues en la revista Sem Terra, septiembre/octubre 2005.
