No puede haber silencios con Pablo Soto. Es inocente.
Hoy es la empresa de Pablo Soto, juzgado por hacer innovación en tecnologías de red. Mañana lo seremos cualquiera. Pablo no es un creador de software libre, ni tiene por que serlo; ha creado es una herramienta pública, no tiene que hacer nada especial para que lo defendamos, defender a Pablo hoy es defender la libertad de crear tecnología y nuestros derechos civiles.
Aceptar instruir una denuncia de 13 millones de Euros a un joven empresa que realiza innovación tecnológica es aceptar la instrumentalización judicial como herramienta para destruir cualquier competencia por parte de la actual “Industria del entretenimiento”. Es aceptar la competencia más desleal, la que aplasta a los pequeños creadores y motores del I+D del futuro, las que nos condenan al pasado para que les paguemos por que ellos son “los creadores” y cualquier propuesta, cualquier resistencia, será aplastada…
Ese es el mensaje que nos lanzan Sony, Universal, Warner, EMI, y demás multinacionales que controlan PROMUSICAE en este juicio-escarmiento pagado con nuestros impuestos. Es la vergüenza que perseguirá a los abogados que la ejecutan y directivos que la patrocinan. Vuestro nombre estará asociado en la memoria de internet a lo que habéis hecho hoy contra Pablo Soto, y mañana contra cualquiera que se oponga a vuestros intereses particulares, por legal, justo o bueno para la humanidad que sea. Aplastar al creador de un protocolo (MP2P) es el equivalente a condenar a Galileo a la hoguera. Es como cerrar un periódico por publicar dónde están las bibliotecas, dónde está la cultura. A todo esto, tenemos a la ministra de cultura extrañamente preocupada porque circulan libros. Si ella usara el MP2P, quizás también podría leerlos, y eso se lo podremos agradecer en parte a Pablo.
Hoy podemos visibilizar nuevamente quién es ese monstruo empresarial internacional cargado de abogados que ataca las libertades civiles y llega a afirmar imposibles matemáticos en público, a decir falacias insostenibles en un juzgado, y realizar piruetas intelectuales para su vergüenza futura. Como diría Galeano, el presidente de PROMUSICAE es un funcionario, que pierde su empleo si no cumplen con eficiencia su tarea. Eso, y nada más que eso. No son monstruos extraordinarios. No vamos a regalarles esa grandeza. Por eso, por realizar el trabajo sucio de Sony, Universal, Warner y EMI, le hemos nombrado “Lobby-Star de la semana“.
Desde Hacktivistas demandamos la anulación de todos los cargos por ser una nueva instrumentalización del sistema judicial para unos intereses muy particulares, exigimos la total absolución de Pablo y la condena pública y popular de los responsables de PROMUSICAE. Dos meses de espera para la sentencia a inocentes no es tolerable, deben ser absueltos YA.