Posted on febrero 7, 2015 in by alevadoNo Comments »

Desde  una perspectiva decrecentista una buena calidad del aire, un acceso universal al agua potable y la posibilidad de disfrutar de espacios verdes de calidad son junto a una buena gestión de los recursos y los residuos piezas claves para impulsar la sostenibilidad ambiental de esta y cualquier ciudad. A su vez, los servicios que los ecosistemas nos proporcionan son indispensables para el bienestar de las personas y es necesario actuar para recuperar esos bienes: la búsqueda de un ecosistema-ciudad  con sus funciones y sus dinámicas es en este aspecto imprescindible. Para ello, desde nuestro punto de vista, es también necesario naturalizar y re-ruralizar al máximo un entorno tan hostil como la ciudad de Madrid. Y parece evidente que todos estos aspectos están en entredicho en Madrid.
energia
Para avanzar hacia los objetivos descritos  es  necesario, por un lado, prevenir, limitar o acotar los daños al medio ambiente; por otro lado, realizar los cambios adaptativos para proteger a los individuos y las poblaciones de las consecuencias adversas del cambio del ecosistema. A su vez, en el aspecto energético es imprescindible impulsar un modelo de ciudad en transición: una estrategia programada para que nuestra ciudad deje de depender de los combustibles fósiles a medio y largo plazo, apostando por las energías renovables y buscando en la medida de lo posible una soberanía energética y una gestión sostenible y socialmente justa de los recursos disponibles y los residuos generados.

 

Con estas premisas y desde las competencias municipales actuales, DecreceMadrid propone:

 

  1. Garantizar un acceso universal a un bien imprescindible como es el AGUA buscando la mayor eficiencia en su consumo.
    1. Estableciendo un precio del agua de forma no lineal, de manera que los primeros 80 litros mensuales sean casi gratis y el precio aumente de forma exponencial conforme el consumo se agudice. Este punto deberá ser negociado con el gobierno de la Comunidad de Madrid.
    2. Recuperando las fuentes públicas de Madrid.
    3. Reduciendo el riego de jardines y zonas verdes hasta una cantidad necesaria. Para ello, es necesario plantar especies que requieran menos cuidados, menos agua y se adapten mejor al entorno confiriendo un valor ecológico adicional.
  2. Impulsar, en este orden, políticas que premien la reducción de RESIDUOS, la reutilización de los mismos, aportando nuevas vidas a multitud de bienes y objetos y, por último, se buscará reciclar las mayores cantidades posibles de residuos.
    1. Estableciendo un horizonte efectivo para alcanzar la meta de reciclado y reutilización del 80% de los residuos orgánicos y no orgánicos. Buscando prioritariamente el cierre de los ciclos: el residuo como primer eslabón de materia prima. Para ello se impulsará:
      1.   El desarrollo de plantas de compostaje y de reciclaje con el mínimo de emisión de sustancias contaminantes.
      2.   La proliferación de espacios de reparación y de reutilización, mediante talleres de autogestión municipales o aplicando fiscalidades favorables a los negocios que trabajen en estas líneas (zapateros,…)
      3.   La aplicación de fiscalidades que incentiven a la ciudadanía y a las empresas a la reducción de los residuos procedentes de sus actividades, en su defecto al reciclaje y, en último término, al deshecho de los residuos.
      4.   La implantación de tasas de gestión de basuras y reciclaje que permitan reducciones de la misma a partir de la comprobación de una separación efectiva de residuos mediante sistemas de recogida selectiva.
    2. Desmantelando la incineradora de Valdemingómez a la mayor brevedad posible.
  3. Redactar un Plan de Acción para el Descenso Energético (PADE) con el objetivo de generar una sociedad resiliente ante los cambios que vienen. Dicho plan contendrá:
    1. Una reducción del número de puntos de alumbrado y modificación de la intensidad lumínica de la ciudad según horarios de forma compatible con las condiciones de seguridad. Para ello:
      1.   Han de respetarse los valores del RD1890/2008 para los niveles de los diferentes tipos de viales teniendo en cuenta, como dice esta norma básica, que se trata de niveles máximos.
      2.   Todos los sistemas de alumbrado general deberán incluir mecanismos para la reducción del flujo a partir de ciertas horas de la noche. A partir de ese momento, toda iluminación ornamental deberá mantenerse apagada.
      3.   Se iluminarán exclusivamente aquellos lugares donde la luz sea necesaria. Se evitará la intrusión lumínica en domicilios, espacios no habitados y por supuesto la emisión directa al cielo.
      4.   La iluminación de establecimientos comerciales deberá permanecer apagada cuando éstos no se encuentran abiertos al público.
      5.   Se deberá planificar un plan realista y fiable de divulgación del PADE y de difusión del conocimiento de la contaminación lumínica.
      6.   La legislación en vigor deberá contener un régimen de control y sancionador creíble y eficaz.
    2. Una apuesta por las energías renovables intentando desligarse el máximo posible del petróleo como energía de referencia (modelo de referencia de las ciudades en transición). Para ello se propone:
      1.   Fomentar la inversión en energías renovables, implantando un horizonte efectivo de adecuación de los edificios municipales para que sean autosuficientes desde un punto de vista energético mediante aislamientos efectivos y colocación de placas solares fotovoltaicas y termosolares. Estos proyectos deberán implementarse paulatinamente a edificios privados
      2.   Fomento de una agricultura ecológica, menos consumidora de recursos energéticos. Con las limitaciones existentes desde la gestión municipal existen diferentes medidas en esta línea (ver apartado 12: Soberanía alimentaria)
  4. Impulsar la sostenibilidad ambiental a escala de ciudad ya que la calidad del medio ambiente existente en la ciudad es proporcional a la calidad de vida de las personas que viven en la misma. En esta dirección proponemos:
    1. Promover mediante una educación ambiental de calidad y más profunda, como los ecosistemas son fundamentales para nuestra supervivencia, incluso dentro de la ciudad.
    2. Fomentar e inculcar el concepto de ecosistema social en el que existe una total interdependencia entre el denominado medio ambiente y la sociedad y de la estrecha vinculación entre ambos (ECODEPENDENCIA).
    3. Impulsar la práctica de la Restauración Ecológica en todos aquellos entornos afectados por actividades humanas.
    4. Crear y fomentar las conexiones ecológicas dentro de la ciudad. Promover mediante prácticas urbanísticas ecosistemas de tamaños variables que lleven a cabo sus funciones.
    5. Fomentar la creación los denominados ecosistemas noveles o emergentes, comunes en las ciudades, cuya composición y abundancia relativa de especies no existía antes en dicho lugar.
    6. Integrar el entorno medioambiental de la ciudad de Madrid en la concienciación colectiva. Para ello sería positivo potenciar la vegetación autóctona como símbolo sociocultural de la ciudad de Madrid.

Fomentar, apoyar y revalorizar el papel de la investigación en el campo del medioambiente y en especial en la Restauración Ecológica, que se realiza en instituciones como universidades, centros de investigación y centros formativos.